Lo mejor en arquitectura yatera

Este superyate de 46 metros, construido por CRN, fue planeado como un segundo hogar, pero más que una casa flotante compagina todos los detalles arquitectónicos que permiten disfrutar del mar y los ambientes naturales visitados por los navegantes.

Después de ser adquirido por el Grupo Ferretti en 1999, CRN se concentró en construir yates de semidesplazamiento con más curvas sigilosas integradas a sus exteriores de metal y aluminio. Para lograr este importante cambio la constructora se incorporó al equipo de diseño naval de Nuvolari & Lenard. El Magnifica 46 salió a flote hace cuatro años y fue el primer proyecto desarrollado por esta combinación de fabricantes de yates. Sus suaves líneas fluyen tranquilamente por la inclinación del arco de radar a lo largo de su casco, y se reflejan más aún en la parte trasera de cada cubierta.

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Los navegantes también pueden disfrutar desde la popa de las tres cubiertas. Sólo hay que fijarse en las líneas que se derraman hacia el yugo de popa, a ambos lados de la sala exterior de la cubierta principal. Este diseño crea lo que CRN designa como su “terraza del mar”, desde donde los huéspedes tienen mejor visibilidad y pueden disfrutar estas sensaciones extraordinarias sobre la comodidad de asientos estilizados en el exterior de la cubierta principal. Y por supuesto que también pueden disfrutar de las ricas viandas presentadas informalmente en la cubierta superior o tomando sol en los cómodos camastros del flydeck.

Pero no es necesario estar al aire libre para disfrutar la vista, ya que el salón, el comedor formal y el salón superior son espacios impregnados de luz durante el día. Adicionalmente, el yate cuenta con grandes ventanales elípticos verticales, que permiten la entrada de los rayos solares bajo cubierta, llegando a cada uno de los cuatro camarotes para visitas (una suite vip, dos cabinas, cada una con capacidad para dos, y un camarote con camas dobles). Este cambio es bienvenido, como propuesta a las típicas ventanas horizontales.

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Hay que destacar especialmente el efecto espectacular que producen los materiales finos, por ejemplo la combinación de paneles de maderas preciosas, como nogal y palo de rosa, con tiras metálicas incrustadas entre uno y otro. Sin embargo, aunque el ambiente contiene materiales de lujo y terminados exquisitamente elegantes, la propuesta es sorprendentemente minimalista. La sencillez de la decoración permite una frescura adicional, que la da su espléndida iluminación.

Es notorio el hecho de que algunos interiores tratan de imitar al mar. Así, son magníficos los diferentes tonos de azul, que es el color temático de las dos cabinas de huéspedes, de la suite VIP y del camarote doble, así como el gran sofá de cuero en la parte de estar de la suite del dueño.  

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Texto: Phil deKanter ± Foto: Pershing