El constructor turco Alia Yachts entregó el superyate Al Waab, la primera embarcación más larga del mundo fabricada en acero y aluminio, con un peso por debajo de los 500 GT.
Al Waab, de 55 m de eslora, no solo resultó el proyecto histórico del astillero con sede en Antalya, Turquía, también estableció un nuevo estándar de la industria naval en términos de espacios externos e internos para su categoría. Al Waab ofrece un 42% más de espacio exterior (incluido el almacenamiento para dos embarcaciones auxiliares) y un 8% más de área interior que los yates comparables del mercado.
El diseño y la arquitectura naval pertenecen al estudio neerlandés Vripack Yacht Design, con la supervisión de SF Yachts, representante del propietario durante la construcción; juntos, procuraron los detalles para maximizar el volumen disponible y garantizar la comodidad de los viajeros.
“Los yates son cada vez más largos y anchos, pero los propietarios quieren mantenerlos por debajo de la marca de 500 GT. Hemos visto un interés creciente en este tipo de yate, por lo que ser uno de los primeros con un proyecto tan impresionante es un hito importante para Alia”.
Gökhan Çelik, presidente de Alia
El Al Waab puede alojar a una docena de pasajeros.
Fabricado con realidad virtual
La realidad virtual fue utilizada al inicio del proyecto para optimizar la planificación del espacio y el diseño ergonómico, y crear una disposición general de planta abierta, centrada en el propietario y su familia.
El yate puede alojar hasta 12 invitados en seis camarotes, algo poco común en un yate de 499 GT, incluida una lujosa suite principal de dos niveles, ubicada en la cubierta superior, con una piscina privada de 4 m en la cubierta de proa.
Un club de playa expandible en la popa, es otro punto destacado. Además, al colocar la bahía auxiliar en una cubierta en la proa, las embarcaciones auxiliares quedan fácilmente accesibles, pero ocultas a la vista. La disposición de la cubierta intermedia proporciona almacenamiento para dos botes auxiliares, un par de motos de agua y otros juguetes acuáticos.
El exterior se combina con el diseño interior contemporáneo y ecológico. El propietario solicitó evitar la luz directa brillante, de ahí la iluminación difusa en toda la embarcación. En el techo fueron colocados listones de bambú con acabado mate, que ayudan a absorber la luz natural que ingresa por los grandes ventanales de piso a techo. Otra característica es la instalación de una pared dorada, iluminada con cristales integrados en el hueco de la escalera que une las tres cubiertas.
El Al Waab está impulsado por un par de motores diésel Caterpillar C18 (725 hp/533 kW), que producen una velocidad máxima de 12.5 nudos y consumen un 35% menos de combustible que los yates de tamaño similar.
El astillero Alia Yachts presentó una embarcación única.