A orillas del lago Como se localiza un original lugar de descanso del siglo XVIII.
Creada originalmente como una opulenta casa aristócrata del siglo XVIII, Passalacqua ha sido anfitrión de figuras de la política, la música y del arte, que lo han convertido en uno de los hoteles predilectos de los viajeros internacionales.
Ubicado en lo alto del pueblo de Moltrasio, al norte de Italia, en una extensión de 2.8 hectáreas, exhibe jardines repartidos en terrazas que se extienden hasta la orilla del lago Como. Esta histórica finca del siglo XVIII ha sido reinventada como un retiro con 24 monumentales suites.
Impregnada de historia, la propiedad ha sido anfitriona de la aristocracia, así como de algunas de las mentes más brillantes del mundo en la música, literatura, arte y política, desde el emperador francés Napoleón Bonaparte hasta el compositor italiano Vincenzo Bellini y el exprimer ministro de la Gran Bretaña, Winston Churchill.
Passalacqua cuenta con lujosas suites distribuidas en tres opciones de alojamiento –Palazz, La Villa y Casa al Lago–, cada una con su propio carácter y encanto distintivos.
La principal residencia histórica, La Villa, ofrece 12 suntuosas suites que celebran el grandioso estilo barroco italiano y los frescos originales, incluyendo una sala de música con balaustrada de doble altura, donde Bellini tocaba el piano.
En el Palazz, originalmente conocido como ‘las antiguas caballerizas', están ubicadas 8 suites con centenarias vigas a la vista, paredes de damasco brillante y una impresionante escalera de caracol. Es un refugio romántico escondido detrás de la Villa como un intermezzo de ópera; ahí se combina la calidez de una casa de campo con detalles exquisitos de diseño.
Por su parte, Casa al Lago está inmersa en el verde del jardín de la finca, cerca del agua. Representa un mundo mágico aparte. Sus cuatro habitaciones tienen vista al lago Como, siendo la forma más encantadora y ecléctica de Passalacqua.
Las maravillosas fuentes
Los majestuosos jardines en terrazas, que dan al lago Como, son simplemente extraordinarios, con escondites privados y más de 15 encantadoras fuentes. El terreno está lleno de centenarios árboles considerados algunos de los más históricos y bien cuidados de toda Italia.
Los Jardines Italianos se encuentran en el punto más alto de la finca y tienen la vista panorámica al lago, mientras que el antiguo Jardín de Invierno da a la piscina de 20 metros, rodeada de sombrillas y tumbonas, amuebladas con una tela fabricada especialmente para Passalacqua por el diseñador de moda JJ Martin.
El hotel, el restaurante y los jardines están abiertos exclusivamente para los huéspedes, al igual que el Spiaggina de color naranja brillante, el original Fiat 500 vintage descapotable por medio del cual son trasladados los visitantes a sus suites.
A la hora de comer
La filosofía culinaria de Passalacqua se centra en un enfoque relajado de 'un hogar lejos de casa'. Los huéspedes pueden disfrutar de una auténtica y sencilla cocina italiana casera, con platillos preparados con ingredientes frescos, y se les anima a visitar las cocinas y conversar con el equipo gastronómico para deliberar el menú del día. Los comensales quedan invitados a elegir la ubicación donde cenarán dentro de la propiedad, ya sea en una de las terrazas, en el Jardín de las Rosas o junto al lago.
Junto con las románticas cenas gourmet, almuerzos informales al aire libre y platos italianos ligeros y frescos en pabellón del bar de la piscina Double J, es posible verse atrapado en una sesión improvisada de preparación de pasta, que podría convertirse en una cata de vinos, o verse interrumpido por la llegada de una caja de trufas para saborear.
El Spa ocupa un mundo aparte en el Palazz. Localizado en las altísimas bóvedas y las columnas del vestíbulo de la planta baja, combina el estilo rural de Como con un toque místico. El salón y las salas de tratamiento rinden homenaje a una época dorada de los viajes y la relajación.
Para la creación del menú de servicios recurrieron a la reconocida innovadora en bienestar, Barbara Sturm, una doctora en estética con una base firme en medicina antiinflamatoria y un enfoque natural y no tóxico para el cuidado de la piel. Los masajes y tratamientos faciales son el corazón del menú del Spa inspirado para relajarse, revitalizarse y recuperar la salud.
Un original Spa
Pero el descubrimiento más sorprendente está bajo tierra: el Spa Sottoterra. Debajo de los jardines de Passalacqua, conectando Palazz, Villa y Casa el lago, se encuentra una galería secreta, excavada en algún momento del siglo XVIII. No se sabe con certidumbre la finalidad del pasadizo –si era para el tránsito del personal de servicio, una ruta seca para los días de lluvia o el facilitador de alguna cita romántica–. Quizás nunca lo sepamos, pero una cosa es segura: la sauna y el baño de vapor fueron instalados en esa cámara abovedada de piedra, la característica más atmosférica de la galería.
Para sintonizarse físicamente, el yoga y la meditación son una cualidad habitual del calendario de actividades diarias en Passalacqua. Para los entusiastas del ejercicio físico, está uno de los gimnasios más pintorescos, equipado con lo último en aparatos y donde uno puede recorrer el antiguo invernadero y adentrarse en el olivar, para disfrutar del mejor entrenamiento con vistas únicas.
Resultado de las atenciones en Passalacqua, en la lista inaugural The World's 50 Best Hotels by 50 Best, dada a conocer en una ceremonia realizada en el Palacio Guildhall, en Londres, donde se destacaron las experiencias hoteleras excepcionales en todo el mundo, Passalacqua encabezó la lista por la calidad de sus servicios e instalaciones. La clasificación refleja las mejores prácticas de viaje recopiladas de 580 votantes anónimos, una mezcla de hoteleros, periodistas y viajeros experimentados de diversas partes del planeta.
Texto: Amura ± Foto: Hotel Passalacqua