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Es un pequeño pueblo en San Luis Potosí que durante la colonia se posicionó como una de las capitales mineras, estando en algunos momentos a la par de Guanajuato. Sus callejones, historia, comida tradicional y arquitectura hacen de este pueblo un paraíso cultural y culinario. Sus paisajes han sido la escenografía de múltiples películas norteamericanas y europeas, por lo que una visita a este maravilloso lugar es como detener el tiempo y vivir un sueño.
Texto: Amura ± Foto: Patrick Monney, Flickr, SECTUR SLP