Uno de los orgullos de la Gran Bretaña

AMURA se congratula por contar en este número con la amable colaboración de la Embajadora de la Gran Bretaña en México, Judith Macgregor. La distinguida diplomática aceptó colaborar para este número, dedicado a la capital de Gran Bretaña.

A nadie sorprende que su conocimiento de Londres sea tan amplio, sensible y vivo como su texto revela; lo inesperado es la fluidez de su descripción durante el minucioso recorrido que hace, guiándonos con detalladas descripciones de sus recuerdos. Da mucho más que datos y despierta el interés del lector en las interminables maravillas que guarda la legendaria capital del Reino Unido, que ella devela desde una perspectiva emotiva.  

 

 

 Creo que los visitantes definitivamente deberían pasar cinco noches en Londres. Estoy segura de que sería una muy buena idea de hecho en cualquier época del año, porque las estaciones son hermosas en el Reino Unido. Tienes una marcada primavera y un marcado otoño, un invierno ligero y un agradable, usualmente muy placentero, verano.

Londres tiene muchos aspectos a considerar, puede usarse el tiempo en hacer muchas cosas diferentes. Por ejemplo, se puede dedicar un día al Londres Real: tenemos el Palacio de Buckingham, el Palacio de la Reina, que tiene una soberbia galería de arte, la Galería de Arte del Buckingham Palace, con la colección personal de la Reina, formada con magnífico arte italiano, europeo, alemán e inglés de todas las épocas.

El Palacio de Buckingham, inaugurado en 1703, desde entonces es el asiento de los poderes reales. Ocupa un terreno de casi 8 hectáreas (77,000 Km2) y su estilo arquitectónico neoclásico corresponde a la Belle Époque. 

 

 

Su Royal Gallery resguarda la Royal Collection, propiedad de la corona británica que no puede ser dividida ni vendida. Abarca varias épocas, escuelas y países: medievales, renacentistas, franceses, flamencos, Monet, Da Vinci, Miguel Ángel, Rubens y Rembrandt; una amplia presencia de pintores británicos como Hogart, Lely, West y colecciones temporales impresionantes como “El Renacimiento del Norte: De Durero a Holbein”, exhibiéndose en la Galería de la Reina de noviembre 2012 hasta mediados de abril de 2013.

Caminar en la zona del Buckingham Palace, cerca de algunos de los parques grandes de Londres, como los Parques Reales -que están bajo la autoridad de la Reina-; son un paseo y un panorama excelentes para disfrutarlos mientras entramos y salimos de las galerías que hay en los edificios históricos.

O puedes subirte a un bote e ir por el Támesis, y entonces sin duda tendrás una percepción de la Bretaña Real, porque navegas desde el Puente Westminster, sede del Parlamento, y la Catedral de Westminster, donde están enterrados todos los reyes y las reinas, pasando por el monumento del Parque Meath hasta llegar a la Torre de Londres con su puente levadizo, que representa la historia extraordinaria del poder real a través de las épocas. El río no es muy largo, más bien es histórico, porque ves varios puntos históricos al pasar.

 

 

También pueden apreciarse imágenes modernas del Londres joven. Porque si vamos un poco más allá de la Torre de Londres, encontramos el Centro O2 en el Millenium Dome, el Parque Olímpico y el Paseo Canary, lleno de edificios diferentes, galerías de arte, cafeterías, tiendas y gente muy agradable caminando; el Parque Olímpico está abierto a los visitantes con muchísimos lugares que se pueden disfrutar y pasar el tiempo.

Con el propósito de afectar lo menos posible al entorno histórico y ecológico, y a la vez aprovechar las construcciones, todas las instalaciones que se erigieron con motivo de las Olimpiadas de Londres 2012 se concibieron como elementos que trascendieron su propósito puramente deportivo para aprovecharlos posteriormente, gracias a la planeación estratégica a futuro, para usos que beneficiarán a la comunidad durante largo tiempo.

Así, mediante pequeñas demoliciones al Parque Olímpico, ahora es un auditorio con capacidad para 25,000 espectadores, en vez de los 80,000 originales; el Velódromo es un  circuito que acomoda a 2,500 asistentes, en vez de los 17,500 durante los juegos; la Villa Olímpica, donde se hospedaron 17,000 atletas, es un conjunto habitacional para 4,000 familias; y el Parque Olímpico es ahora un pulmón más de Londres, rival en belleza y tamaño con el mítico Hyde Park.

 

 

 

 

 

Es una parte vibrante de Londres, esa que ha sido restaurada, y está llena de vida. Se puede ir a Spitalfields y Shoreditch, que son áreas donde la gente fabricaba textiles y tenía pequeñas industrias. Siguiendo por la ribera están algunos de los restaurantes más innovadores y elegantes de Londres, pero con buena cocina; y grandes mercados, mercados étnicos, así que puedes pasear por los cosmopolitas mercados étnicos en Brick Lane. El verano del año pasado estuve en Brick Lane, en un “Mex Fest”. Era un festival en la zona mexicana, en Shoreditch, literalmente sobre Brick Lane, y había muchos negocios vendiendo comida preparada y muchos mexicanos atentos, listos para comer.

Son mercados muy coloridos y muy interesantes donde puedes encontrar todo tipo de comida. Spitalfields es una zona comercial nueva en una antigua área textil. Y si regresas un poco del Este hacia el centro, hay magníficos mercados como el Burroughs Market, famoso en todo el mundo por su variedad de comida y vegetales. Casi como un mercado de la Ciudad de México, pero diferente porque hay una gran población asiática y un evidente contexto asiático.

Puedes hacer la ruta del viejo Londres Británico de la realeza o del Londres Moderno; y puedes ir en barco, en bicicleta, en metro o en tren, porque Londres ahora tiene un transporte muy diferente... O puedes hacer compras. Tenemos unas tiendas que obviamente hay que visitar: Harrods, que es como un país en sí misma, es enorme; tenemos Harvey Nickols, y ya estamos en Kensington, donde hay muy buenos lugares que ver y dónde comprar.

 

 

Puedes rodear Kensington e ir a Night Brick, muchos de los diseñadores vanguardistas están haciendo su aparición en Londres. Alexander McQueen Enterprises creó el vestido de novia de Kate Middleton, Condesa de Cambridge; Victoria Beckham acaba de abrir una tienda en Flaws Square, en el área de Kensington, y otros de los mejores diseñadores del mundo.

Bastante cerca de ahí, los hombres pueden hacerse trajes de diseñador a la medida, siguiendo la tradición de usar materiales de muy alta calidad. En toda la área próxima a Night Brick, Kensington y Piccadilly se puede vivir la vieja tradición de los zapatos a la medida hechos a mano, accesorios hechos a mano y camisas para hombre. 

En la German Street, que sigue siendo el área tradicional de la sastrería de excelencia, se encuentran Fortum y Mason, que pronto estarán formalmente en México, donde tienen extraordinarios tes, cafés, bisquets y confecciones que son parte de la tradicional “British Cuisine”.

Después podemos volver hacia Covent Garden, donde está la moda contemporánea más avanzada en el rango de pequeñas tiendas -aproximadamente a una milla-, moda poco convencional, así como marcas para gustos “high-end”: Burberry, Stella McCartney, lo más elevado, todo tipo de accesorios. Las marcas más prestigiadas se pueden encontrar en las calles Oxford, Spencer y Norman, que tienen una amplia variedad de ropa de moda a precios muy competitivos, y una moda de nivel medio bastante interesante.

Así que se puede salir de Harrods y encontrar algo más estilizado, tomar una copa, alegrarse la vista y tomar rumbo a Covent Garden, que también tiene un mercado de flores; hay enormes mercados de flores en todos lados, pero éste ha sido el mercado de flores tradicional de Londres. También es posible ver a personas presentando su talento al público abierto: cantan, bailan,... una variedad grande. Yo diría que lo principal de Londres es la variedad. Tal vez sea la ciudad más cosmopolita del mundo; pero aún así, tiene una personalidad que amalgama con lo moderno, es curioso. Como que está el Viejo Londres, pero bajo los puentes, en las viejas catedrales, en toda esa infraestructura, y el Londres de hoy tiene más espacio para la gente, para caminar, para hacer representaciones y más variedad de mercados de muchos tipos. Antes de ir a Londres, realmente debe usarse el internet, visitar las páginas de ‘visitlondon.com’ o de ‘visitbritain.com’. ¡Hay tantos recorridos que pueden hacerse!

 

 

 

Se presta mucho para que la gente camine, pero hay también muy buen transporte público y bicicletas como las “Eco-Bicis” de la Ciudad de México, lo cual es muy conveniente porque es posible pasar de un ambiente al otro. Y se puede ir de pronto a la modernidad, estar en lo netamente británico tradicional y de repente en lo muy cosmopolita británico-asiático, británico-africano, ¡incluso británico-latinoamericano, en el sentido de que podrías entrar a “La Lupita”, muy mexicana! En fin, que ir de compras es fantástico, creo. High Street y los diseñadores, High Street y la alta costura, siempre a poca distancia un lugar del otro. No hace falta recorrer millas y millas.

 

 

Acerca de los restaurantes, a los que a mí me gusta ir,... uno es el River Café, por supuesto, que queda por el río, y que no es sólo un “café”, sino un hermoso restaurante con cocina predominantemente italiana. Ruth Rogers, la esposa de Richard Rogers, el fundador del Café, logró un maravilloso ambiente al que es fantástico ir. Está el Gordon Ramsey Restaurant, en Chelsea, que también es un lugar soberbio.

Me gustan los restaurantes con gente, con actividad, en los que puedes comer platillos bastante bien preparados. Pueden ser muy flexibles, para mi gusto particular. Hay comida muy tradicional, restaurantes orientales,... Si vas a Notting Hill o a Chinatown, en Soho, también hay soberbios restaurantes y tiendas de víveres italianos. Hay algunos lugares nuevos a los que no he ido, como el que se llama “Viajante”, portugués de estilo experimental, en el lado Este de Londres. Por último, cualquiera de los buenos hoteles tiene excelente ‘cuisine’.”

La Embajadora Macgregor comentó que, como no llega a hoteles cuando viaja a Londres, no tiene experiencia en hospedaje; conoce sus restaurantes, como dijo, los que mantienen un nivel de excelencia en los mejores hoteles de la ciudad:

 

 

 

El Rubins At The Palace Hotel, detrás del Buckingham Palace, que es la quintaesencia de lo tradicional. Hay hermosos hoteles en Park Lane, como el Duchess Hotel, muy tradicional y con una maravillosa vista del Royal Park; y creo que nos falta The Boundary Hotel, que es de una nueva cadena, construido en lo que fue una tienda de artesanía industrial o una fábrica que fue completamente renovada a un estándar realmente muy, muy elevado.

Pero otra área a donde debe ir la gente es al London Bridge. Ya sabemos que se está construyendo -o ya se terminó de construir, creo que ya abrió- el Shard, el edificio más alto de Europa. Pienso que es un edificio muy distintivo, un edificio alto con forma de punta. Refleja la luz, porque vemos el atardecer sobre el Támesis.

El London Bridge está pleno de historia, se puede visitar en grupo y recorrer el nacimiento y la vida del escritor Charles Dickens. Y muchos de los edificios medievales del siglo XIX aún existen, justo detrás y lejos de las arterias principales. Hay una buena cantidad de restaurantes y hotelitos interesantes junto al río, que conducen al corazón de Londres.

 

 

 

 

 

 

 

 

 

Una cosa más que interesante es que todos nuestros museos son gratuitos, no se paga por visitarlos. Tal vez debamos pagar para asistir a una exhibición especial, pero incluso muchas exhibiciones son gratis. Está el British Museum, tenemos objetos y artefactos de todas las grandes culturas del mundo. Tenemos el Museo de Victoria y Alberto, que tiene las mayores colecciones de moda y artesanía decorativa del mundo. Está el Museo de Ciencia, si los visitantes tienen hijos pequeños bien pueden visitarlo, es casi 100% interactivo, así que desde el momento que entras por la puerta, ya estás jalando, empujando y haciendo cosas. Está junto al Museo de Historia Natural, que posiblemente tenga la colección más grande de dinosauros en el mundo. Y todos estos museos británicos son de lo mejor en términos de interés para el visitante, multilingües, interactivos y van familias con hijos pequeños. Están muy bien organizados y quedan cerca de Harrods.

Un rasgo peculiar del Reino Unido es su tendencia a conservar su historia, sus tradiciones, lo cual permite conocer al detalle los acontecimientos y las manifestaciones culturales a través del tiempo. En Inglaterra, pero sobre todo en Londres -y especialmente en su zona real-, es fácil apreciar las obras de los maestros de la pintura de siglos atrás, piezas que les han dado un lugar en la historia universal y que los muchos museos de Londres guardan para que estos genios revivan ante las miradas maravilladas de los visitantes. Además de los dedicados al arte, los hay de diversos temas.

Es un ambiente familiar fantástico y hay muchos, hay cientos de museos especializados. Tenemos el Madam Tussauds de Artes, Oficios y Películas (Arts and Crafts and Films), para ir a ver las famosas piezas en cera. Porque creo que es el mejor museo de cera del mundo, justo cerca de la que fuera casa de Sherlock Holmes en Baker Street, que también es un museo. Y el Museo de Londres tiene todos los personajes de los lugares donde operaba Sherlock Holmes. Es decir, realmente es un lugar muy rico, hace falta tiempo porque quienes vayan quedarán sorprendidos por la cantidad de opciones de cosas por hacer y por ver. Creo que posiblemente esté entre los más ricos del mundo actualmente. Se está invirtiendo, hay una gran cantidad de gente famosa que vivió o, de una manera ficticia, operó en Londres. ¡Es tan grande el drama, la historia Real, la historia moderna! Y luego está la verdad, el Londres joven, irreverente. 

O podemos dar una vuelta usando la bicicleta como medio de transporte, eso es muy importante. O puedes tomar un taxi tradicional, negro y clásico, que te llevará a donde gustes. Y hay taxis que han sido adaptados para gente con discapacidades; realmente hacen falta más, no son mayoría. Hemos dado un gran impulso durante las Olimpíadas a la fabricación de botes, trenes, metro, camiones y taxis, mucho más amigables para el usuario que anda en silla de ruedas o con muletas, o con lo que gustes.

En Londres hay diversos tipos de taxis. Unos son los tradicionales, conocidos como “Hackney carriages”, que pueden ser tomados en la calle sin reservación previa, o con ella a través de un “sitio”. Los “Minicabs” deben contratarse previamente, no pueden ser abordados en la calle. Para ser conductor de taxi en Londres, los aspirantes deben aprobar un difícil examen de atención al pasajero y conocimientos prácticos. Existe un curso de preparación, que puede tomar hasta cuatro años, y por supuesto que hay taxistas multilingües.

Les lleva mucho aprender. Se llama “The Knowledge” y comprende saber por dónde ir a donde sea dentro del área del Londres central. Quiero decir, Londres es como la ciudad de México: tiene una población muy grande, así que posiblemente no podrías conocer todos los suburbios, todas las afueras. Pero dentro de cierto perímetro del Londres central, un chofer de taxi tiene que saber llegar cerca del destino, de otra manera no puede seguir adelante ni siquiera con un sistema GPS.

La guardia Real, el té a las 5, la aristocracia y la pronunciación misma de su idioma han dado fama al pueblo británico de ser “flemático”. Sin embargo llama mucho la atención el humor lúcido y a la vez agudo de los comediantes del Reino Unido. El contraste da origen a la duda: ¿son flemáticos o humorísticos?

Esto parece interesante. La gente británica es flemática en el sentido de que, tal vez históricamente, culturalmente, no acostumbra apanicarse, es calmada. Valoran que la gente sea calmada, ordenada, así que la gente se adapta; de hecho, los mexicanos se adaptan allá. 

 

 

 

La gente se forma en orden, no le importa esperar, pero a la vez, puede ser muy irreverente y crítica. Y algunas de las caricaturas que vemos en los periódicos son muy, muy filosas, muy directas, no se tiene misericordia con las figuras públicas... Pero la sociedad tiende a ser muy respetuosa con la Reina.

En general se considera que los políticos son elegidos democráticamente por el pueblo y que, en consecuencia, deben responderle a la gente y se pueden hacer bromas de ellos, satirizarlos. Ha sido una larga tradición en Gran Bretaña desde el siglo XVIII, la sátira política, burlarse de los líderes políticos. Y no hemos hablado, pero obviamente una de las emociones a nivel cultural es la Fiesta. En Londres podemos ir a los juegos, que son fiestas de lo mejor... En muchas no podemos conseguir reservación el mismo día. Siempre, como precaución, trata de reservar en cuanto llegues a Londres. Pero si es una Fiesta nacional, tenemos grandes fiestas con presentaciones casi todos los días, en la mañana y en la tarde. 

Están en la parte oeste de Londres, que es un área grande que marca la parte central. Hay muchas fiestas: de vanguardia, tradicionales, el teatro Royal Opera House, el Coliseo, el teatro Sadler’s Wells,... siempre está pasando algo. Y como dije: si un visitante llega súbitamente a Londres, tiene buenas posibilidades de entrar al teatro o puede formarse en la taquilla, porque siempre el público es muy dinámico, se pueden desocupar asientos. Es lo que yo hago cuando regreso a Londres, todos los días trato de ver si hay asientos y casi siempre tengo suerte.

 

 

 

 

 

 

En el contexto de esta boyante historia cultural, adornada con trascendentes logros académicos, militares, científicos, literarios y sociales, es difícil elegir la aportación del Reino Unido que mayor impacto haya tenido en el mundo.

Tal vez tenga que ser el idioma inglés, porque cada vez se convierte en un idioma para la comunicación internacional y un pasaporte para la prosperidad y las transacciones de comercio global. Y creo que con el idioma llegó un amplio conocimiento. El dominio del inglés como idioma no es algo que necesariamente hayamos creado nosotros, pero es una plataforma que se dio a la música inglesa, las estrellas Pop fueron seguidas en muchos países en los que no siempre se hablara otro idioma, pero el público hablaba suficiente inglés para comprender la música y la letra.

México es un ejemplo muy interesante, porque la gente aquí no siempre sabe mucho sobre Inglaterra, pero conocen a los Beatles y se saben las letras de los Beatles, conocen a los Beatles. En México puedes encontrar abuelitas y nietas cantando a los Beatles, ¿cierto? Eso es muy interesante y bastante peculiar de México, de hecho. 

También cruzas los rangos de edad, es maravilloso. 

Así que creo que esa aportación sería el idioma inglés y la literatura inglesa.

Pero creo que la otra sería, tal vez, la Carta Magna; nos ha llevado muchos, muchos cientos de años desarrollarla. Fue elaborada cuando existía el Rey John, en el siglo XII. Y fueron los Barones quienes dijeron “Queremos los derechos”, y el Rey dijo “Bueno, está bien, aquí tienen sus derechos pero quiero su lealtad.” Ésta es una declaración básica de principios hecha por la gente. Y con el tiempo esos derechos gradualmente, no sin dificultad, se convirtieron en ley. Y esas leyes se fueron implementando y respetando y todo el término “el gobierno de la ley” comúnmente se liga a la Carta Magna como la primera iniciativa presentada por un pueblo a su gobernante.

Y creo que en el Reino Unido se da una maravillosa ironía: no tenemos una Constitución escrita, pero convivimos con las normas escritas en la ley, y creo que es algo que con toda nuestra cultura y todo nuestro trabajo y nuestras interrelaciones hemos impactado no sólo a todos los países en los que hemos tenido nuestro Imperio o nuestras colonias -que luego fueron independientes pero conservan el sistema de gobierno y el respeto por la ley-, sino más ampliamente. Así que le puedes seguir el rastro yendo a la Gran Bretaña y al Parlamento, y viendo algunos de los documentos originales.

 

 

Texto:  Embajadora de la Gran Bretaña en México ± Foto: Craig Easton / James McCormick