Felicidad Nacional Bruta
En el planeta tierra existen alrededor de 200 naciones, de las cuales solamente una ha hecho la promesa de mantener por siempre una neutralidad en la emisión de CO2. En realidad ha excedido este ofrecimiento al lograr una cifra negativa de emisiones, que alcanza los cuatro millones de toneladas de dióxido de carbono anualmente. Esta patria se llama Bután, uno de los pocos sitios con un sistema eficaz para la conservación de su extraordinaria biodiversidad.
El reino de Bután no tiene litorales. Cuenta con una superficie de 38, 394 km2 y es un oasis verde que está enclavado entre las grandes montañas de la cordillera del Himalaya. Sus fronteras colindan al norte con la República Popular China, lo que incluye 470 km del Tíbet, en la región autónoma de Xizang. Limita al oeste, sur y este con la India; otros países cercarnos son Nepal y Bangladesh. Un 72,5% del reino está cubierto por bosques, otro 10% por nieves o glaciares, y un aproximado del 14% está poblado o es utilizado para sembradíos. Todo el país es montañoso, excepto 16 km de llanuras subtropicales en el extremo sur.
El origen del nombre Bután puede provenir del sánscrito Botanta (Bhotanta) que significa "el fin del Tíbet" o del sánscrito Bu-attan (Bhu-attan) cuyo significado es "tierras altas". Los habitantes del reino se reconocen como Drukpas, ya que nombran a su patria “Druk Yul” –la tierra de los Dragones del Trueno; una metáfora que hace mención a las tormentas potentísimas que se forman en las cimas del Himalaya.
“"... si el Gobierno no puede crear la felicidad (dekid) para su pueblo, no hay ningún propósito para que el Gobierno exista. ”
Por los caminos del Budismo
Bután es un país confesionalmente budista, en su inmensa mayoría practicantes del linaje Mahayana (“vehículo diamantino”) –una rama esencialmente mágica, también conocida como tantrismo.
El budismo Mahayana se compone por numerosos símbolos y rituales, que tienen como objetivo despertar y desarrollar la conciencia con la energía más pura del ser. El practicante ha de ser guiado expresamente por un maestro, ya que es un camino recomendado únicamente para aquellas personas con un total control de las capacidades de su mente, que han logrado una comprensión total de la compasión, y que son capaces de contener la poderosa energía liberada a través de la práctica tántrica.
Los budistas creen que el alma está destinada a pasar 108 etapas en su viaje. Esta cifra tiene múltiples significados en diversas filosofías universales, para las cuales es un número sagrado. Por ejemplo, 108 cuentas tiene el rosario, o “mala”, con el cual los monjes realizan sus oraciones de meditación, ya que por lo menos han de cumplir 108 plegarias para alcanzar un estado meditativo profundo; también existe la creencia de que 108 líneas de energía se conectan con el chacra del corazón. La lista de analogías sería interminable, misteriosa como la propia esencia de este reino asombroso.
El budismo y el misticismo se plasman también en la bandera: el amarillo representa el poder temporal del rey, mientras que el naranja encarna el poder del budismo y al centro sobresale la figura del dragón tronante. Existen otras religiones en Bután, ya que, sobre todo en el sur, hay adeptos al hinduismo (conjunto de ideas, prácticas religiosas, filosóficas y culturales originadas en la India); así mismo prevalecen creyentes del Bön (antigua tradición tibetana anterior al budismo); del animismo (creencia que sostiene que todo tiene un alma o espíritu) y del chamanismo (que está relacionado a los poderes sobrenaturales, ya sean adquiridos o inherentes a ciertas personas).
Hay dos personalidades claves en el desarrollo de la filosofía budista dentro del país: Padmasambhava o Gurú Rimponché (siglo VIII), a quien se le considera como un segundo Buda, y Tsangpa Gyare Yeshe Dorje (1594-1651), quien unificó las regiones en guerra de Bután, convirtiéndose en el líder político y espiritual del reino. El budismo ha dado forma a la historia de Bután y al modo de vida de su pueblo.
El paisaje de las ciudades –caminos y poblados de Bután– está ataviado por la presencia de los molinos y banderas de oración. Esto es así porque dichos objetos, al moverse mecidos por el viento (desde los más pequeños que los fieles y monjes agitan con sus manos, a los grandes molinos presentes en las casas y templos) esparcen cientos de oraciones, que van dirigidas a todos los seres sintientes del universo sin discriminación alguna.
El país que nunca fue colonizado
Largos períodos de su historia son desconocidos. Esto es atribuible a catástrofes naturales y a incendios recurrentes. Se piensa que el lugar estuvo habitado desde tiempos remotos –probablemente alrededor de 2000-1500 a.C. Y es importante destacar que aunque estuvo expuesto a periódicas invasiones (tibetanas, chinas e indo-británicas), Bután ha retenido la autonomía desde su fundación.
No obstante, las fuerzas británicas provenientes de la India provocaron diversos enfrentamientos que concluyeron en 1865 con la firma del Tratado de Sinchulu; en virtud del cual, Bután recibiría un subsidio anual a cambio de ceder parte de sus fronteras. Otro acuerdo firmado en 1910 permitió a Gran Bretaña guiar los asuntos externos de Bután, pero sin intervenir en las cuestiones internas. En 1949, un pacto formal indo-butanés dio como resultado el regreso de algunas áreas anexadas por los británicos. En la actualidad, India es el primer socio y aliado de Bután.
El tiempo de los reyes filósofos
El 17 de diciembre de 1907 se estableció una monarquía sui géneris con la coronación de Ugyen Wangchuck como primer soberano de Bután. Era un hombre avezado en las artes de la guerra, y a la vez un practicante piadoso que, con gran visión de futuro, sembró las bases de un reino virtuoso. Fue un gran protector de los cuerpos monásticos en todo el territorio y un promotor ferviente de la formación de los jóvenes butaneses en el budismo; su reinado terminó con su deceso en 1926.
Su hijo, Jigme Wangchuck, fue coronado inmediatamente, y su reinado se prolongó hasta su muerte en el año 1952. Para entonces, había logrado cimentar un país estable que, aunque estrictamente aislado del mundo exterior, había recibido la semilla para la llegada del gran reformador de Bután: el tercer rey Jigme Dorji Wangchuck.
Este joven rey inauguró el camino para abrir las puertas de Bután al mundo exterior. Introdujo el Sistema Judicial y realizó reformas agrarias. Creó la primera Asamblea Nacional, el Consejo Asesor Real y formuló el primer parlamento unicameral del país; además, estableció los planes económicos quinquenales que se instauraron a partir del periodo 1961-1966 y que permanecen vigentes. Durante su reinado, Bután logró el reconocimiento de las Naciones Unidas como nación soberana en 1971.
Tras su repentina muerte, le sucedió el cuarto rey Jigme Singye Wangchuck con apenas 16 años. Uno de sus logros fue la transición a una monarquía constitucional. También trasladó una gran parte de su poder al Consejo de Ministros, instituyendo una forma más democrática de gobierno; pero su mayor aporte no solo a Bután, sino al mundo, fue la creación de una nueva forma de medir el progreso: en lugar del Producto Interno Bruto, él estableció el Índice de la Felicidad Interna Bruta (FIB), que hoy en día es el orgullo de los habitantes de Bután. Se fundamenta en los siguientes indicadores: buena gestión de los asuntos públicos, desarrollo económico equilibrado, conservación del medio ambiente, así como la preservación y el fomento de la cultura.
En el 2006, con apenas 56 años de edad, abdicó en favor de su hijo Jigme Khesar Namgyel Wangchuck, quien es egresado de la Universidad de Oxford, donde obtuvo un título en Relaciones Internacionales y en Política. En su discurso de coronación expresó: “en todo mi reinado nunca os gobernaré como un rey, cuidaré de vosotros como un hermano y os serviré como un hijo”. Es el único monarca absoluto de la historia que voluntariamente ha pedido a su pueblo que acepte y permita la instauración de una democracia electoral; lo cual significa una considerable limitación de su poder. He aquí el resultado del camino emprendido por los reyes filósofos de Bután.
http://www.grossnationalhappiness.com
Rumbo a Bután
La distancia en línea recta entre México y Bután es de 14,158 km; para llegar se debe realizar una escala en Europa con destino a Bangkok (Tailandia), Katmandú (Nepal), Delhi o Bombay (India) y Singapur. Desde alguno de estos lugares es posible tomar un vuelo de las líneas aéreas butanesas Druk Air o Bhutan Airlines, ya que solamente sus pilotos son capaces de aterrizar en el único aeropuerto internacional del país, situado en la ciudad de Paro. Esto se debe a la complejidad de la pista de aterrizaje, rodeada por la cordillera –que en el territorio butanés resguarda los únicos bosques no destruidos del Himalaya, con sus inmensas cumbres.
Curiosamente, en Bután se encuentra la montaña inexplorada más grande del mundo: se trata de Gangkhar Puensum, cuya cima alcanza los 24,840 ft de altura. Se dice que estas formaciones son consideradas sagradas por los butaneses, hasta tal punto que dispusieron una prohibición para la práctica del montañismo en cualquier pico que esté por encima de 19.685 ft.
Hasta la década de los 60 no existían carreteras, automóviles, teléfonos, sistema postal o electricidad en todo el territorio. Los primeros turistas comenzaron a arribar en 1974, pues apenas en 1983 se inauguraron los servicios de aviación. Tampoco tenían acceso a la televisión, cuya señal se abrió por primera vez en 1999, primero con un solo canal local, que un año más tarde –con el inicio del siglo XXI– se amplió satelitalmente a 49 canales internacionales.
Durante el propio año 2000, también se introdujo el servicio de internet. Un mundo desconocido llegó con estas tecnologías contemporáneas a los ojos de los habitantes de Bután, hasta entonces enfocados en preservar sus profundas tradiciones budistas, en la importancia de la familia y con la visión colmada por los paisajes primigenios de su entorno.
Ciudad de Paro: historia y naturaleza
A partir de la salida del aeropuerto, comienza un recorrido que lleva al visitante al encuentro con su belleza natural: edificaciones únicas, templos y monasterios, bajo el influjo de una espiritualidad que marca todo el ambiente. Esto nos lleva a recordar una enseñanza de Buda: "Así como una vela no puede quemarse sin fuego, los hombres no pueden vivir sin una vida espiritual".
La ciudad de Paro es un fértil valle situado a 2,300 m de altura, que reúne en sus calles una mezcla entre lo antiguo y lo moderno, ya que la mayoría de los edificios han adecuado la planta baja para establecer negocios, restaurantes y otros sitios de esparcimiento; a la vez es el cobijo de algunos de los más antiguos y venerados templos y monasterios en Bután: espacios vivos, centros de las actividades religiosas, culturales, educativas y políticas del país.
Los DZONG (fortalezas y monasterios) son ancestrales obras maestras arquitectónicas de Bután, levantadas en sitios con gran significado religioso, que están presentes por todo su territorio.
Fortaleza en montón de joyas
Dzong de Rinpung
En una de las orillas del caudaloso río Paro se erige este monasterio fortaleza, al cual se puede llegar cruzando un puente tendido sobre las aguas. El monasterio data del año 1644 y la historia recoge que fue construido por el fundador de Bután: Zhabdrung Ngawang Namgyal. Este dzong es hoy en día el centro administrativo para el distrito de Paro y la escuela de los cuerpos monásticos para la región occidental del país. También es la sede de una de las festividades más significativas, llamada Paro Tsechu, que es una de las mejores maneras de experimentar la antigua cultura viviente de Bután.
El nido del Tigre
Taktshang Goemba Dzong
En Paro también se encuentra el famoso Monasterio llamado el Nido del Tigre. Su construcción representa una proeza arquitectónica, ya que el complejo cuelga prácticamente en un precipicio situado en la ladera vertical de una montaña, a 3,100 m del suelo. El monasterio comenzó a construirse en 1692, en honor al del gurú Padmasambhava; está dividido por cuatro templos principales y es un símbolo cultural para Bután. Fue reconstruido recientemente debido a un catastrófico incendio ocurrido en 1998.
Otros sitios de interés en Paro son: el templo budista Kyichu Lhakhang construido en el siglo VII, que es uno de los monasterios más antiguos del país; también Dungtse Lhakhang, un pequeño templo que conserva pinturas que narran la evolución de la filosofía budista tántrica, así como de sus deidades y protagonistas principales.
Museo Nacional de Bután
El museo fue inaugurado en 1968 para albergar un gran acervo conformado por 3,000 obras de arte, que abarcan alrededor de 1,500 años de su historia. Su misión es la “preservación, promoción y conservación del patrimonio cultural tangible e intangible hacia el cumplimiento de la Felicidad Nacional Bruta”.
Está ubicado en un monumento del siglo XVII. Sus exposiciones muestran textiles, joyas, artesanías, sellos y estampas de seda. La planta superior contiene un "árbol" que representa las figuras principales de las cuatro escuelas religiosas del budismo.
Abril-octubre de 9 a.m. a 5 p.m.
Noviembre-Marzo de 9 a.m. a 4 p.m.
P.O. Box No. 1227, Paro, Bután
+ 975 8 271511
Esta dirección de correo electrónico está siendo protegida contra los robots de spam. Necesita tener JavaScript habilitado para poder verlo.
http://www.nationalmuseum.gov.bt
Timbu, la capital
Es el centro del comercio, religión y gobierno del país donde habitan aproximadamente 100,000 habitantes, así como la familia real. Aquí es posible encontrar diversidad de restaurantes, cafés internet, centros comerciales, bares, cajeros automáticos, un campo de golf; es el punto donde la influencia de la vida “moderna” se puede palpar, aunque conserva su fuerte identidad cultural. Actualmente también se sienten los efectos del tráfico automovilístico; sin embargo, siguen sin usar semáforos: en los sitios donde es absolutamente necesario, un policía dirige el flujo del tránsito mediante indicaciones manuales.
Fortaleza de la religión gloriosa
Tashichho Dzong
Se trata de un monasterio y fortaleza budista situado en el extremo norte de Timbu, que ha debido ser reconstruido y ampliado varias veces a lo largo de sus 800 años de existencia. Actualmente, alberga tanto la sede del gobierno como la sala del trono, las oficinas del rey, además de otras dependencias gubernamentales. Las dos puertas por las que se puede entrar están custodiadas por las figuras de los chennizang o deidades protectoras. Contiguo a este sitio, se erige el Palacio Dechencholing, donde habita la familia real de Bután.
Un monumento dedicado a la paz
The National Memorial Chorten of Thimphu
La palabra Chorten significa “el asiento de la fe”. Se trata de una gran estupa –monumento funerario dedicado a la paz, prosperidad y la armonía del mundo– que fue construida en homenaje al tercer rey dragón de Bután: Jigme Dorji Wangchuk. En este sitio se celebra anualmente el Monlam Chenmo (Gran Festival de Oración). Por todo el territorio se encuentran estas edificaciones sagradas, que desde tiempos antiguos eran veneradas por los peregrinos, quienes –también en el presente– en estos lugares hacen sus ofrendas y suelen meditar, caminando en círculos para recorrerlos varias veces mientras rezan.
Museo Textil de Bután
El museo textil fue inaugurado en el año 2001, concebido y patrocinado por su Majestad la Reina Ashi Sangay Choden Wangchuck. Sus salas de exposiciones se centran en seis temas principales: tejidos de urdimbre, tejidos de trama, papel de los textiles en cada religión, logros en artes textiles, textiles de fibras autóctonas y la colección real.
Otros sitios que no se debe perder en Timbu son: la Biblioteca y Archivo Nacional de Bután, que guardan un tesoro fundamental de su historia; sus temas abarcan: religión, medicina, artes y cultura. Otro lugar interesante es El Museo Nacional del Patrimonio Folclórico, que brinda una visión del estilo de vida tradicional de Bután. Además de una visita obligada a la Estatua de Buda Dordenma; su construcción terminó en 2015 y se trata de una colosal figura de 51 m de altura, que contiene en su interior un templo con un amplio espacio para meditar.
Es ya un sitio relevante de peregrinación y atractivo turístico; el monumento se levanta en una cima, desde donde es posible observar a plenitud todo el paisaje que rodea la capital.
Para los interesados en los productos tradicionales de Bután, los fines de semana, en el Mercado Centenario de Agricultores, podrán encontrar una amplia oferta proveniente de todos los rincones del país; en las calles de la ciudad también es posible adquirir artesanías, libros especializados sobre budismo y otros temas de interés; obras de arte, tallas de madera, aceites esenciales, y tejidos, entre otros.
En cuanto a galerías de arte, la oferta incluye el espacio Water Dragon Gallery (www.facebook.com/Water-Dragon-Gallery-361158300615032/), dedicado al arte contemporáneo butanés, que está dirigida por el pintor Pema Tshering, y la Galería Alaya, establecida por la asociación sin fines de lucro VAST (http://www.vast-bhutan.org/), dedicada a promover el patrimonio artístico del país.
En el resto de su territorio aguardan otras regiones y ciudades donde predomina la majestuosa biósfera; la urbanización llega de a poco, por lo que muchos de sus habitantes aún viven a la usanza de siglos pasados, en comunidades cuya riqueza radica en su cultura, dialectos, y tradiciones propias, con un ritmo que aquí se encuentra marcado por la felicidad.
Museo Textil de Bután
Lunes a sábado de
9:00 am a 4:00 pm
P.O. Box: 1551 Chubachu
Timbu – 11001, Bután
+975 2 335 117
http://www.royaltextileacademy.org/
Tourism Council of Bhutan
Consejo de Turismo de Bután
Post Box 126 Timbú, Bután
+975-2-323251
Esta dirección de correo electrónico está siendo protegida contra los robots de spam. Necesita tener JavaScript habilitado para poder verlo.
Asociación de Tour Operadores de Bhután
Drimey Lam, Timbú, Bután
+975 2 322 862
Texto: Maruchy Behmaras ± Foto: RED TRAVEL / •© NILDA PARALITICI / VIAJET / PLANETA FELIZ / ESCAPEDIS / AES / PADONA / AE / © HUNGCHUNGCHIH / © BLOOPIERS / PD / © FEIJE / RIEMERSMA / © SAMRAT35 / © HUNGCHUNGCHIH / VOPA / PD / JEREMY / IMGUR / PENS STARER2 / RHEFRFS / BHUTAN / GF / SERENDIPITI XPRESS / © STEVE ALLEN / SUNLITNIGHTS / © PICHAYA PEANPATTANANGKUL / © JEEWEE / © AVIKGENXT / © SAMRAT35 / © WOUTER TOLENAARS / ALWAYS BHUTAN / UEW / JOHNSTANLAKE / MEDIA.GADVENTURES / MARC.PECQUET / NATIONAL GEOGRAPHIC / OAS / ANANDOART / EG HOAL / EVE MUSEOGRFAFIA / TERRIS SCHNEIDER / Gelay Jamtsho by Bhutan-360