El Flying T Twin es el primer troubillon de vuelo de Chopard, quien lo define como el “reloj de pulsera para caballero” definitivo.

Está hecho para los estándares del Sello de Ginebra, lo que significa que cada centímetro de su interior y exterior está decorado y/o acabado a mano. La esfera es de oro macizo y está decorada con un acabado en forma de caracol, sobre el que se aplican marcadores dorados, y galvanizada completamente con un acabado de rutenio gris.

El caso se basa en oro rosa Fairmined de 18 quilates. Chopard es el principal comprador de este tipo de oro, que había reservado para la producción de sus complicados relojes –algunos de sus modelos de alta joyería.

Chopard anunció que ahora está 100% comprometido con el uso de oro Farmined en todas sus colecciones, colocando a la marca, al menos en el mundo de la relojería, por delante del resto.