Situado a una distancia de 40 km de Capadocia se encuentra el lago de sal Tuz (Tuz Gölü en turco), en la ruta hacia Ankara, capital de Turquía, y Estambul, con una extensión de 1,665 km2.
Una de las hipótesis sobre de sus orígenes lo sitúan 20,000 años atrás, cuando una parte del mar quedó atrapado por la elevación de los montes Tauro, en la cercanía de Capadocia, debido a movimientos tectónicos durante la última glaciación. La salinidad del lago Tuz, solo es superada por la que se registra en el Mar Muerto.
El lago Tuz es un área de protección medioambiental especial. En algunas épocas del año la densa capa de sal puede alcanzar hasta 30 cm. Su profundidad fluctúa entre los 60 cm y los 2 metros. En el siglo XVII se pavimentó un camino que aún lo cruza de lado a lado. Es un humedal clase A, hábitat de 71 especies endémicas, de acuerdo con el proyecto de investigación de biodiversidad. En total, Turquía tiene 9,576 hectáreas de áreas protegidas.
El lago Tuz proporciona más del 50% de la sal en Turquía, de la que se producen 300,000 toneladas anualmente y se exporta a más de 60 países. Visitar este sitio se ha convertido en una experiencia predilecta en los últimos años para tours fotográficos, de salud y naturaleza.
Es un paisaje de belleza hipnótica, en el que dependiendo de la época del año las opciones de disfrute cambian; también lo hace la coloración y densidad de sus aguas debido a la asombrosa composición de los elementos que lo conforman: ésta es una de sus características más atractivas.
El lago es comparado con un espejo del cielo, ya que, durante los meses de verano, su blancura es tan brillante sobre toda su extensión, que puede ser observada claramente desde el cosmos, por lo que es usada para calibrar los equipos de teledetección de los transbordadores espaciales.
En otra temporada, debido a otro proceso natural la floración de las algas Dunaliella Salina las aguas del lago Tuz se tiñen de un hermoso color rosa. Estas algas son usadas para la cosmética y productos dietéticos por sus propiedades benéficas para la salud.
El lago Tuz es una zona medioambiental especial.
¿Por qué los científicos están tan interesados en el lago Tuz?
El área protegida del lago Tuz es considerada como el mejor modelo para estudiar el modo de hacer frente a las consecuencias del cambio climático.
Se investigan genéticamente 20 plantas endémicas por su alta resistencia a la sequía y climas extremos que, científicos prevén, pueden suceder en el futuro, de mantenerse las condiciones actuales.
Aquí se encuentra un banco de plantas capaces de sobrevivir, además de a la salinidad, a la sequía, y que no se encuentran en otro lugar del planeta, ésta es una de las razones por las que es considerada un área de reserva genética. Los científicos estudian la viabilidad de transferir sus genes a las plantas comestibles con el fin de volverlas más resistentes en distintas latitudes del planeta, o incluso para ser llevadas al espacio.
En el lago Tuz existen diferentes especies de bacterias halófilas (adaptadas a ambientes salinos extremos) que son utilizadas por sus propiedades en diversos campos de la biotecnología: ser fáciles de cultivar, necesitar un mínimo de nutrientes y ofrecer un escaso riesgo de contaminación. Se aprovechan para la degradación de los residuos tóxicos, producción de encimas y proteínas, entre otros.
En Turquía existen 9,576 ha de áreas protegidas.
Un destino de observación de aves
Existen varios manantiales y un humedal de agua dulce en la extensión terrestre del lago, además de abundantes aguas subterráneas; a los minerales de éstas se les atribuyen grandes beneficios. Al estar rodeado de mesetas, el lago Tuz no tiene salida a otros afluentes. Bajo el lago se encuentra una inmensa reserva de gas natural.
Éste es un destino cada vez más visitado por los amantes del turismo de naturaleza. Se encuentra en la ruta migratoria de las aves, como los flamencos rosados que recorren largas distancias para anidar y pasar el invierno en sus aguas; en esta región del planeta se ha documentado la cifra récord anual de nacimientos de esta especie. También anidan grullas, gansos y patos salvajes, entre otras.
En Turquía existen 9,576 ha de áreas protegidas.
Texto: Laura Riestra ± Foto: middle east monitor, toruko notorriko, Genel haberleri