El reacondicionamiento sostenible de yates no consiste únicamente en actualizarlo, sino en hacerlo de una manera que respete y preserve los entornos marinos.

En el astillero turco Mengi Yay, están comprometidos con prácticas ecológicas, que garantizan que los navíos de lujo atendidos dejen la menor huella posible en el planeta.

La renovación de yates se vuelve sostenible cuando implica el uso de materiales respetuosos con el medio ambiente, el reciclaje de piezas antiguas y la implementación de sistemas de eficiencia energética. Se trata de reducir los residuos, disminuir las emisiones y garantizar que los navíos se modernicen para que sean más ecológicos sin comprometer el lujo y el rendimiento.

El abastecimiento ético en el reacondicionamiento de embarcaciones implica obtener materiales de proveedores que prioricen la sostenibilidad. Esto significa elegir proveedores que utilicen recursos renovables, tengan prácticas laborales justas y mantengan una cadena de suministro transparente. El seguimiento del origen de materiales como la madera de teca, metales y telas garantiza que se extraigan o produzcan de manera responsable.

Un ejemplo son las tarimas. Las alternativas para sustituir la teca tradicional son teca recuperada o las tarimas sintéticas fabricadas con plásticos reciclados. Para los interiores, fibras naturales como el bambú y el algodón orgánico, que son sostenibles y lujosas. Además de resinas de origen biológico en lugar de la fibra de vidrio tradicional, lo que reduce el impacto ambiental de los componentes estructurales.

El seguimiento de los materiales es fundamental para garantizar que todos los componentes utilizados en el proceso de reacondicionamiento se obtengan de forma responsable. Permite a las empresas de reacondicionamiento demostrar su sostenibilidad y su cumplimiento de las normas medioambientales, algo cada vez más importante para los propietarios de yates preocupados por el medio ambiente.

Otras innovaciones son la instalación de paneles solares y turbinas eólicas para disminuir la dependencia de los combustibles fósiles. Los sistemas avanzados de tratamiento de aguas residuales y la iluminación LED también contribuyen a la sostenibilidad de un navío. Además, los equipos de propulsión híbridos que combinan motores eléctricos con motores tradicionales pueden reducir significativamente las emisiones.

En el caso de las embarcaciones antiguas, puede prolongar su vida útil, lo que reduce significativamente el impacto ambiental asociado con la construcción de un nuevo barco desde cero. Al actualizar los sistemas y mejorar la eficiencia del casco, los yates renovados consumen menos combustible y producen menos emisiones, lo que contribuye positivamente a la conservación del medio ambiente.

En la parte económica, el reacondicionar, reconstruir o restaurar navíos antiguos puede preservar e incluso aumentar significativamente su valor al incorporar nuevas tecnologías, diseños y soluciones de ingeniería, siempre que la embarcación no se encuentre en un estado deplorable. Sin olvidar que el mantenimiento regular desempeña un papel crucial en la conservación del valor del yate, ya que garantiza que todos los equipos funcionen correctamente y sin fugas ni errores.