Con el nuevo Grande Trideck, Azimut traza un rumbo audaz y redefine su superyate insignia.
El exterior, bajo el estilo de Alberto Mancini, mantiene la elegancia que distingue a la marca, pero el interior, concebido por el dúo m2atelier –Marijana Radovic y Marco Bonelli–, marca el inicio de un nuevo lenguaje creativo para la Serie Grande.
Esta dirección, que debutará también en dos modelos más durante el Festival de Yates de Cannes, está inspirada en un concepto que resume toda su esencia: Barefoot Luxury, una filosofía, estética y emocional que responde a la nueva generación de armadores que buscan lujo sin complejos, con una vida en el mar más libre, espontánea y personal. Aquí, la sofisticación no está reñida con la informalidad: todo se integra para crear un espacio donde la naturalidad es el verdadero lujo.
Fiel al Diseño Integral de Azimut, m2atelier pensó cada elemento –desde la estructura hasta el mobiliario– como parte de un todo armónico. El interior resulta cálido, sobrio y minimalista, con materiales de texturas ricas pero usados con mesura. Las líneas rectas dominan para ampliar la sensación de espacio, mientras las diagonales aportan intimidad y hospitalidad.
Uno de los iconos de este concepto es el Muro Revelador: una pieza de alta costura en lamas verticales que oculta un televisor con un mecanismo deslizante hecho a medida. No es solo funcional; es una declaración artística, la primera de una serie de “muros destacados” que aparecerán en futuros proyectos de la marca.
Para Radovic y Bonelli, la luz es la auténtica protagonista: no un adorno, sino un elemento arquitectónico que esculpe los espacios, revela texturas y aporta profundidad emocional. En el Grande Trideck, la luz guía la mirada, conecta ambientes y dota a cada espacio de su propia atmósfera.
La experiencia a bordo es una coreografía de geometrías y perspectivas: desde la suite del propietario, bañada en luz natural gracias a sus particiones de cristal, hasta el salón principal que conecta visualmente con el mar. Giorgetti, emblema del diseño italiano, fabrica mobiliario a medida siguiendo los trazos de m2atelier, consolidando la coherencia estética.
En cubierta, la proa estrena una piscina empotrada con chaise longue y un respaldo giratorio, mientras que el Sky Lounge se convierte en un refugio versátil: puede ser un cine íntimo, un comedor improvisado o un salón relajado, adaptándose al ritmo del propietario.
El Azimut Grande Trideck no es solo un superyate para vivir; es un espacio que se siente. Representa una obra maestra donde la innovación estética, la precisión arquitectónica y el lujo emocional se fusionan para redefinir lo que significa navegar con estilo.