Leopard Catamarans, fabricante de catamaranes de crucero de alto rendimiento, da un paso decisivo al ampliar la garantía mejorada, protegiendo no solamente la inversión de sus propietarios, se traduce en un principio esencial en la náutica de lujo: la auténtica libertad de navegar al contar con la certeza de estar respaldado en cualquier puerto del mundo.
Construidos por el astillero sudafricano Robertson and Caine (R&C) y diseñados por los arquitectos navales neerlandeses Alexander Simonis y Maarten Voogd del estudio Simonis Voogd, los catamaranes Leopard se han ganado un lugar privilegiado en las marinas más exclusivas del mundo. Ahora, con este nuevo esquema de protección, la firma consolida un modelo de acompañamiento que trasciende la venta, brindando a sus clientes seguridad, respaldo y eficiencia en cualquier etapa de su travesía.
El programa se articula bajo un marco de garantía dual: la del constructor y la de los fabricantes de equipos originales (OEM). Esta estructura no solo amplía la cobertura, sino que, gracias a la digitalización, permite un seguimiento en tiempo real y una comunicación directa entre propietario, técnicos e ingenieros. Con ello, se reducen tiempos de respuesta y se garantiza la máxima protección de la inversión.
La garantía de R&C incluye 14 meses de cobertura frente a defectos de construcción, desde detalles estéticos hasta incidencias de instalación. A ello se suma una protección extendida de 24 meses para ventanas no estructurales, diseñadas para resistir las tensiones de los entornos marinos más exigentes. En el largo plazo, los propietarios cuentan con seis años de garantía estructural para cascos, cubiertas, flybridges y componentes vitales, ofreciendo una tranquilidad que pocas marcas de la industria pueden igualar.
En paralelo, la garantía OEM asegura la cobertura de sistemas clave –motores Yanmar, generadores Northern Lights o electrónica Raymarine–, con la ventaja de que Leopard actúa como único interlocutor, eliminando la necesidad de que los propietarios gestionen múltiples relaciones técnicas.
Uno de los elementos más innovadores es el portal digital de garantías, alojado en el sitio web de Leopard. A través de esta plataforma, cada reclamación es gestionada por un agente de atención al cliente asignado, quien supervisa el proceso completo: desde la evaluación inicial hasta los pagos o reembolsos finales. El uso de Trello como herramienta de flujo de trabajo brinda transparencia absoluta: los propietarios pueden seguir en vivo el avance de su reclamación, con actualizaciones, notas técnicas y comentarios directos de los equipos responsables.
Esta estructura cobra aún mayor relevancia gracias a la red global de Leopard, presente en seis continentes y más de 20 países. Así, sin importar si el yate navega en el Caribe, el Mediterráneo o el Pacífico Sur, los propietarios reciben asistencia inmediata y prioritaria. La política es clara: minimizar tiempos en astillero y devolver a los clientes al mar lo antes posible.
Más allá de la cobertura, el programa representa un cambio cultural en la industria náutica: un enfoque centrado en el cliente y en la experiencia de navegación. Con más de 50 años de evolución y escucha activa a su comunidad, Leopard Catamarans ratifica que la calidad de un yate no se mide solo por su desempeño en el agua, sino también por el respaldo que lo acompaña a lo largo de su vida útil.