La casa italiana de diseño Lazzarini presentó Gran Turismo Mediterranea, un concepto basado en la firma automotriz Ferrari.
Lazzarini, cuyo eslogan es “Piensa en el futuro, nunca olvides el pasado…”, continuamente presenta sus creaciones –que en ocasiones se vuelven realidad–, y en esta ocasión presentó el Gran Turismo Mediterranea, un yate de 27 metros caracterizado por contar en su interior con un garaje para transportar un Ferrari. El diseño está basado en las líneas del Cavallino Rampante, que ahora podría ser considerado Ferrari of the Sea.
Está planeado para que por la popa ingrese el Ferrari del poseedor de la embarcación. Este primer acercamiento a lo que podría ser un yate Ferrari tendría que recibir un ajuste en el diseño para protegerlo del rocío del mar, que podría dañar la pintura. Otro detalle es el poco espacio a bordo una vez que el auto es colocado en la popa de cubierta principal
Al igual que los modelos superdeportivos salidos de la casa de Maranello, en Italia, el yate Ferrari presenta aspectos aerodinámicos, ideales para que alcance su velocidad máxima de 70 nudos. Otro detalle espectacular del Gran Turismo Mediterranea son las amplias puertas estilo “alas de gaviota” que conducen a la cabina interior.
Sin el bólido escarlata a bordo, el espacio para los visitantes se amplía.
En el interior, la cabina es lo suficientemente grande como para acomodar cómodamente a cuatro invitados y un par de miembros de la tripulación.
En la cubierta principal hay un par de camarotes dobles para el dueño y sus invitados, y en la inferior dos habitaciones para la tripulación. También cuenta con un salón y un comedor en la cubierta principal. El Ferrari of the Sea no tiene tina de hidromasaje, ni una amplia sala. No está diseñado para largos recorridos, sino pensado en la velocidad, y por ello, la cabina del capitán incluye asientos individuales con respaldo alto.
Solamente es un concepto, y en un futuro podría convertirse en una realidad, y continuar ahora en el mar la competencia con Lamborghini, que en 2020, junto con el astillero Tecnomar botó el Lamborghini 63.
El yate está pensado para la velocidad, llevando en su interior un Ferrari.