La isla sagrada
Visitar la isla de Delos es una experiencia sin precedentes; es ingresar a un lugar sagrado: el santuario de Apolo.
La historia de Delos que nos relata la mitología, así como un himno homérico dedicado a Apolo, sostienen que Zeus, el padre de los dioses y de los hombres, quien reinaba en la cima del monte Olimpo, se enamoraba fácilmente de las jóvenes, ya fueran diosas, semidiosas, nereidas, ninfas o doncellas mortales, y que se valía de todo género de artilugios para conquistarlas. Así sucedió con Hera, la única que llegó a ser su esposa, y a quien sedujo al posarse en su pecho convertido en cuco, y ella, enternecida, lo arrulló en su regazo. A Danae la atrajo convertido en lluvia de oro; a Leda en cisne; a Europa en toro blanco, y así era como se repetían cotidianamente las historias de las infidelidades del dios, rey del Olimpo y poseedor del rayo.
Columnas y ruinas en Delos, Grecia.
Delos es considerada una isla sagrada por ser el lugar de nacimiento del dios mitológico Apolo y la diosa Artemis.
Hera, quien tenía entre sus atributos la protección de la naturaleza y de la vida armoniosa del hogar, era también una diosa extremadamente celosa y poseía poderes ilimitados. Era enemiga implacable al perseguir a las víctimas de los amoríos de su esposo, aunque a él siempre acababa perdonándolo.
Pero veamos lo que aconteció a Leto o Latona, una doncella que cayó ante el asedio de Zeus y quedó embarazada, como tantas otras. Apenas se enteró Hera de esto, juró vengarse y ordenó a la tierra continental y a las islas que no la acogieran para dar a luz allí. Secuestró además a Ilitía, la diosa de los partos, para imposibilitarle toda ayuda. Zeus, mortificado, intercedió ante Hera y logró que ésta redujera el castigo permitiendo que Latona alumbrara en una isla que no estaba conectada a la tierra. Esta isla había emergido atada al tridente de Poseidón, pero luego el dios marino la había liberado, dejándola flotar, sin rumbo, perdida en medio del océano.
Delos se ha convertido en un museo al aire libre.
La terraza de los leones en Delos.
Ruinas de la Mansión de Cleopatra en Delos.
Utensilio antiguo de cocina.
La Casa de los Delfines fue llamada así por su atrio de mosaico que ilustra unos delfines.
Mosaico de un leopardo encontrado en la Casa de las Máscaras, exhibido en el Museo Arqueológico de Delos.
Así, la pobre doncella se lanzó al mar en su búsqueda, y nadó durante largo tiempo. Cuando se sentía ya agotada, avizoró un promontorio a lo lejos y logró arribar exhausta a la isla. A su llegada, se sorprendió de ver que estaba rodeada de cisnes.Esta isla debe su nombre a la forma en la que apareció ante Latona: Delos, que significa visible. Se dice que en ese momento Zeus se apresuró a atarla con unas cadenas al fondo del mar para proteger a Latona.
Allí parió primero a Ártemis, diosa de la luz de la luna, y posteriormente ésta ayudó a su madre con el nacimiento de Apolo, dios de la luz solar. Los mellizos fueron considerados más tarde dentro de los 12 dioses que conforman el Panteón Olímpico.Apolo era protector del arte y un músico notable que deleitaba a los humanos con las melodías que brotaban de su lira; poseía también el don de la clarividencia. Ártemis era diosa de la caza, de las tierras vírgenes y la castidad. Apolo fue protector de los muchachos y Ártemis de las muchachas.
Otra referencia mitológica interesante es la relacionada con la visita de Teseo, príncipe ateniense hijo del Rey Egeo, que luego de matar al famoso minotauro de Creta, en su regreso a Atenas, hizo una escala allí.
Restos de una puerta perteneciente a una ciudad hundida en las costas de Delos.
Una Isla habitada únicamente por la historia
La isla de Delos se convirtió desde la época arcaica en un bien establecido santuario consagrado a Apolo. Griegos de todo el mundo viajaban a ese lugar para adorar al dios Apolo y a su hermana gemela Ártemis.
Delos es una de las islas más pequeñas de las Cíclades, (nombre que significa conjunto de islas que forman un círculo) en el Mar Egeo, con una extensión de sólo 3.46 km2, y que apenas se distingue como un punto minúsculo en el mapa de Grecia. Sin embargo, la isla es muy importante debido a su contexto histórico y mitológico. También está ligada geográfica y políticamente a Mykonos, que es una de las cinco islas más famosas de Grecia, junto con Creta, Rodas, Santorini y Corfú.
Para llegar a Delos hay que tomar una pequeña embarcación desde Mykonos. Las embarcaciones son siempre pequeñas y el trayecto no es mayor a los 20 minutos porque la distancia es solamente de una milla náutica. El puerto es pequeño y rudimentario, donde está prohibido el acceso a otras embarcaciones que no sean las de la localidad. Delos es una isla deshabitada. Los únicos que pueden pernoctar allí son los guardias y autoridades, que no alcanzan el número de 20. No hay ningún edificio moderno destinado a servir de albergue turístico; es exclusivamente un sitio arqueológico, un verdadero santuario.
Los visitantes tienen que traer consigo sus comidas y bebidas, tomando en cuenta además que todo el recorrido es al aire libre y con altas temperaturas en el verano.
Uno de los pasajes sorprendentes de la historia es que en el año 426 a. C. los atenienses, por cuestiones religiosas, establecieron una ley para purificar Delos y, para ello, extrajeron todas las osamentas de las tumbas de la isla y las trasladaron a Renea, la isla vecina. Prohibieron además los nacimientos y las muertes en la isla; consecuentemente, las mujeres embarazadas se veían obligadas a abandonar el lugar. La etapa final de esta purificación concluyó en 422 a. C. con el exilio de toda la población, hasta evacuarla totalmente.
Ruinas de la Mansión de Cleopatra en Delos.
Estatua sin cabeza de una mujer al costado de la Terraza de los dioses extranjeros en Delos.
Sin embargo, se calcula que a principios del siglo 1 a.C. la isla estaba poblada otra vez por unas 30.000 personas y que los puertos fueron habilitados para la transportación anual de alrededor de 750.000 toneladas de mercancías.
En ese periodo de apogeo económico y cultural se asentaron en la isla comerciantes ricos, banqueros y propietarios de todo el mundo conocido. Esto atrajo a un gran número de constructores, artesanos, escultores y ceramistas que construyeron para ellos casas de lujo, decoradas con frescos, mosaicos y estatuas. La pequeña isla pronto se convirtió en un emporio –el centro comercial más grande del mundo.
Sus restos arqueológicos son inapreciables porque hacen evidente este esplendor con magníficas construcciones de diversos tipos y épocas, como los templos de Apolo, de Artemis, de Latona, de Hermes, así como el dedicado a Dióniso, etc. Pero también porque es uno de los pocos lugares donde se puede apreciar cómo era la vida cotidiana en la antigüedad a través de las casas, de los enseres domésticos, etc.
La riqueza se concentró en la isla, y esto despertó la codicia de los romanos más poderosos, creando conflicto debido a las malas relaciones existentes con Roma. Delos fue atacada y saqueada dos veces: en el 88 y en el 69 a. C.; a partir de entonces empezaron a abandonarla paulatinamente.
En 1990 fue reconocida por la UNESCO como patrimonio cultural de la humanidad
Texto: Natalia Moreleón ± Foto: © Ramonespelt / © PULPITIS / ETHNOS / ad / © Haris Vythoulkas / ROYAL CHRONICLES / © JOOP KLEUSKENS / JAS.JPG / © Asteri77 / © Songallery / © Mark Higgins / © FRANCOCOGOLI / SEFEA LE / © GIAN MARCO VALENTE / ADSF © ASTERI77 / © COLACAT2006 / © RAINPREL / ARGOLAS / SDF / © ANDREI / STANCU / © Brento / ASHX / MAID / © ZWAWOL / © SERGEIALYOSHIN / © PAUL PHILLIPS / © IVAN JELISAVCIC / SANAT /