Una tierra bendecida por los dioses
Las profundidades turquesas del Sur del Pacífico albergan vastos secretos. Uno de ellos es un grupo de 330 islas y 500 islotes que comprenden la paradisíaca República de Fiyi, situada entre Australia y Hawái. La antigua colonia británica es ahora un lugar apasionante donde la magia y la maravilla forman parte de su vida cotidiana, con una diversidad cultural de raíces polinesias, melanesias y micronesias, mezcladas con influencias indo-inglesas y chinas. Cuando descubres este lugar, es como si llegaras a otro mundo, dejando tus huellas en la arena blanca y buceando en las aguas tranquilas de las costas en cada una de las islas.
Sólo una tercera parte de las islas está habitada; la mayor parte de la población se concentra en Viti Levu y Vanua Levu, las islas más grandes de la República, y esto hace del resto de Fiyi uno de los lugares más prístinos del planeta. Sus vistas y las aventuras únicas que ofrece han atraído a visitantes de todo el mundo, perfecto para lunas de miel, o para relajarse con amigos y familia, además de ser una experiencia inolvidable. Recorramos los caminos de las islas y naveguemos por las transparentes aguas del Pacífico, hipnotizados por los colores de la naturaleza y las vivaces personalidades que habitan cada isla.
La historia de Fiyi comienza cuando los primeros pobladores Lapita –fiyianos prehistóricos– emigraron desde el oeste en el período Holoceno. Existe un debate con respecto a sus influencias: si son principalmente melanesios del sudoeste de Oceanía o polinesios del Pacífico central. Arqueológicamente, algunos científicos sostienen que sus orígenes se encuentran en el sur, y que más tarde evolucionaron para convertirse en la cultura melanesia. Sin embargo, en términos de lenguaje, el Fiyiano pertenece al subgrupo de lenguas oceánicas del Pacífico central, originarias de Polinesia.
Algunos sitios arqueológicos han ayudado a determinar que la primera colonización fiyiana comenzó entre 1700 y 1000 a.C. Llamaron a su tierra Viti. En las historias fiyianas, los guerreros Lutunasobasoba y Degei llegaron a Viti Levu (la isla más grande en Fiyi) desde Egipto en una canoa nombrada Kaunitoni y fundaron el pueblo fiyiano. La leyenda afirma que llevaban una caja llamada Katonimana, que significa "Caja de Bendiciones". El Katonimana se perdió en una tormenta, y en lugar de recuperarla, Lutunasobasoba proclamó que era la voluntad de los dioses. Hoy en día se cree que permanece bajo el agua en las islas Mamanuca, extendiendo bendiciones a los lugareños y visitantes.
“Concede bendición, Oh Dios de las naciones, a las islas de Fiyi Unidos nos erguimos bajo la noble bandera azul
Honramos y defendemos siempre la causa de la libertad Adelante marchamos juntos
Dios bendice Fiyi”
- Himno Nacional Fiyiano
La occidentalización del Pacífico Sur
Inicialmente, los vitianos sólo habitaban las costas, pero a medida que la población creció, comenzaron a expandirse al centro de las islas. La agricultura se convirtió en un modo de vida prominente, pero la sobrepoblación tuvo como consecuencia el lado siniestro de Fiyi y su conocida historia de canibalismo, que culminó en el siglo XIX cuando Fiyi se convirtió en una colonia británica y el cristianismo fue introducido. El último hombre que fue asesinado por una tribu fue el misionero Thomas Baker en 1867.
Barcos europeos y estadounidenses encontraron estas islas en su búsqueda de nuevos territorios, intercambio y comercio. Se cree que Abel Tasman fue el primer europeo en descubrir Fiyi, junto con las Islas Tonga y Nueva Zelanda, durante una exploración de navegación por las aguas del sur. El legendario explorador británico James Cook navegó a través de las islas en el célebre HMS Endeavour durante su viaje para descubrir un continente meridional mítico en el nombre de Gran Bretaña. El capitán William Bligh también navegó a través de Fiyi en 1789 después del histórico motín del buque de la Armada Real británica Bounty; el paso entre Viti Levu y Vanua Levu fue llamado Bligh Water en su nombre.
En el siglo XIX, los balleneros y comerciantes europeos y estadounidenses se aventuraron más frecuentemente a Oceanía, y cambiaron el mercado de Fiyi, introduciendo herramientas de metal, tabaco y pólvora. Los misioneros y comerciantes de sándalo llegaron medio siglo después; para entonces, Fiyi estaba plagada de guerras tribales como consecuencia del comercio y las armas. La influencia occidental también fue evidente en la arquitectura, el vestuario y el cristianismo. Pero la occidentalización de Fiyi se contrapesó con el aumento de la población y la prosperidad de la cultura fiyiana.
A mediados de siglo, Seru Epenisa Cakobau, un cristiano convertido, había subido al poder y era conocido como Tui Viti (Rey de Fiyi), reconocido como tal por Estados Unidos. Sin embargo, un profundo conflicto interno de Fiyi entre jefaturas tribales había surgido, y hubo rebeliones como la Batalla de Kaba, donde Cakobau resultó vencedor con la ayuda de la flota tongana. Logró unificar Fiyi como un reino en 1871. Pero como rey, Estados Unidos lo hizo responsable del incendio provocado en la isla de Nukulau, hogar del cónsul estadounidense John Brown William, y exigió $ 44.000 como compensación. Presionado por los estadounidenses e incapaz de pagar la deuda, Cakobau, junto con el primer gran consejo de jefes, decidió firmar la escritura de la cesión de Fiyi a la corona británica el 10 de octubre de 1874. El título de Tui Viti entonces fue concedido a la reina Victoria.
Una colonia británica en la Guerra del Pacífico
Fiyi fue una colonia británica de 1874 a 1970. Como colonia, Fiyi enfrentó muchas adversidades. Hubo conflictos internos y discordia política entre los indios –traídos por los británicos como obreros–, europeos y fiyianos. Las epidemias redujeron la población de 200,000 a alrededor de 87,000, y las plantaciones –y por lo tanto la economía– sufrieron debido a constantes disputas por tierras entre grupos étnicos. Fiyi quería una nación que diera prioridad a los intereses de los nativos en lugar de los plantadores occidentales, mientras que los indo-fiyianos buscaban igualdad.
Sus problemas persistieron durante la Segunda Guerra Mundial, durante la cual Fiyi jugó un papel crucial en la Guerra del Pacífico después del ataque de Japón a Pearl Harbor. Debido a la ubicación de las islas, Fiyi se encontró al frente de la guerra y sirvió como base de entrenamiento para los aliados. El Aeropuerto Internacional de Nadi fue originalmente construido por Nueva Zelanda como pista de aterrizaje para aviones militares, y Estados Unidos convirtió la Bahía de Nadi en una base naval para su Armada, asumiendo la responsabilidad de la defensa de las islas en mayo de 1942. Los fiyianos también fueron elogiados por su valentía en el campo de batalla, y aunque su participación en la guerra fue limitada, sobresalieron en combate.
Una república independiente del siglo veinte
El final del siglo XX y la primera década del siglo XXI fueron políticamente problemáticos y transitorios en general. Hubo tres golpes de estado (1987, 2000 y 2006) que definieron lo que Fiyi es hoy. Es una región que siempre ha sido gobernada por valores militares. Los jefes tribales surgieron de los guerreros nativos, y su identidad combativa ha permanecido arraigada en su política. La intervención militar en la política era inevitable, y los golpes de estado fueron concebidos como una protesta en busca de una nación étnicamente unificada, democrática, e incorrupta.
Desde entonces, la economía de Fiyi ha florecido; la industria azucarera se ha desarrollado y las islas se han consolidado como un destino turístico idílico. Esto, a su vez, ha fomentado la educación, la inversión en medicina y la infraestructura para el progreso nacional, social y económico.
Caminando sobre el fuego
A pesar de sus problemas políticos y económicos, la comunidad está profundamente arraigada en sus creencias míticas y rituales antiguos. Hoy en día, la mayor parte de la población es cristiana, bajo la influencia europea, pero Fiyi es un país multicultural con al menos tres grandes orígenes. Esta es una tierra donde el cristianismo, el hinduismo y el sijismo convergen; por lo tanto, es muy probable encontrar mezquitas en algunas partes de las islas, junto con iglesias y templos donde se puede asistir a las ceremonias y volverse parte de la experiencia religiosa de Fiyi.
Hay diversos rituales espirituales que los lugareños practican para purificar sus almas. Los visitantes que participan en eventos culturales deben ser respetuosos de la tradición y seguir las costumbres locales. Por ejemplo, se considera ofensivo usar sombreros en presencia de jefes tribales, y al entrar en una casa, se aconseja quitarse los zapatos. Además, cuando se llega a un pueblo, se espera que el invitado presente un regalo.
Kava (de la planta Yaqona) es la bebida nacional, y las ceremonias sagradas de Kava ocurren por todo Fiyi; si se le ofrece un tazón de Kava, se considera un insulto rechazarlo, así que disfrute del efecto relajante que proporciona esta bebida basada en raíces y de la compañía de los lugareños. Otra ceremonia es el Lovo, que consiste en un banquete preparado en un horno subterráneo, excavado en la tierra, donde los ingredientes se cocinan en carbones incandescentes. Se celebra en ocasiones especiales y como una forma de honrar el arte culinario, mientras que la ceremonia de Meke ofrece la oportunidad de aprender de la historia de Fiyi y escuchar las leyendas populares mediante canciones y la danza típica.
Otra ceremonia popular es la caminata sobre fuego, originada hace aproximadamente 500 años en la aldea de Nakarovul, en la isla de Beqa. La leyenda dice que un joven llamado Tunaiviqalita ayudó a un dios espíritu, y a cambio, el dios le dio la habilidad de caminar sobre piedras calientes; esta habilidad fue transmitida de generación en generación. La ceremonia representa tradición y simbolismo; crea un vínculo entre los miembros de la comunidad. Durante la ceremonia, los “caminantes” son acompañados por bailarines y cantantes hasta que cruzan las piedras de fuego. Es una experiencia inolvidable llena de cultura, trajes típicos, narraciones, acrobacias y más.
Arte Fiyiano
En las aldeas, el arte sigue siendo parte de la cultura contemporánea. Las artesanías folclóricas todavía están presentes y los lugareños las practican ampliamente, utilizando habilidades que han heredado de sus antepasados. El tejido de esteras y cestos es una práctica universal en Fiyi. Las hojas de palma y las hojas de pandano fibroso son típicamente utilizadas en la creación de materiales y tejidos. Son representativos de riqueza y se ofrecen como regalos en ocasiones especiales como bodas y visitas a los jefes tribales. La cerámica se remonta al 1290 a.C. –la era de los primeros pobladores– y los artistas modernos siguen utilizando las mismas herramientas que sus antepasados para la escultura: piedras redondeadas, rocas o paletas de madera. La talla de madera ha ido desapareciendo porque la especialización y las habilidades precisas que requiere se han perdido a lo largo de siglos; existen pocos maestros talladores que realizan artefactos ceremoniales y otras artesanías para uso especial.
Un lenguaje tricultural
Los idiomas oficiales en Fiyi son el inglés, el hindi y el fiyiano, y aunque ha existido una marcada separación histórica entre estos tres grupos étnicos, el inglés es el medio con el que se comunican entre sí; esto inevitablemente ha creado una fusión de culturas. Los indios de Fiyi hablan una forma de hindi que es diferente del indostánico que se habla en el norte de la India. Le llaman coloquialmente Fiji Bat, y consiste en una mezcla de hindi con inglés e influencias Fiyianas –una versión coloquial de indostánico, el cual evolucionó del sánscrito. El inglés ha pasado por un proceso similar; aunque se basa en el inglés tradicional, está mezclado con palabras y expresiones Fiyianas.
El fiyiano es una lengua austronesia, de la familia Malayo-Polinesia. Desde la independencia, el fiyiano ha sido promovido en las islas –en la radio, la televisión y la literatura– en un esfuerzo para preservar el lenguaje para las futuras generaciones. Bula es una de las palabras fiyianas más famosas; es el equivalente a "Hola" y significa "Vida". Bula le dará una cálida bienvenida a las islas; le despedirá, y deseará bendición, felicidad y amor. Es una palabra que abarca la bondad de Fiyi y el respeto que tiene por la vida y la naturaleza.
Un paraíso cinematográfico
La incomparable belleza de las islas de Fiyi ha atraído a los productores de Hollywood durante años. Los paisajes tropicales ofrecen escenarios fílmicos naturalmente impecables para representar historias de vida, historias de supervivencia, aventuras y más, con una cinematografía impresionante. Fiyi tiene todo lo necesario para inspirar a directores, actores y productores a crear películas que enamoren a la audiencia con las maravillas de la naturaleza.
El actor Tom Hanks filmó Náufrago (2000) del director Robert Zemeckis en la prístina Isla Monuriki, ubicada frente a la costa de Viti Lev u.
Otra película popular ambientada en el archipiélago de Fiyi es La laguna azul (1980), dirigida por Randal Kleiser y protagonizada por Brooke Shields y Christopher Atkins, filmada en la isla privada de Nanuya Levu. La versión de 1949 de esta película también se produjo en las islas Yasawa. Su majestad de los mares del sur (1954), las aventuras del marinero David O'Keefe tras el naufragio de su barco, ofreció una nueva perspectiva sobre las costumbres y danzas de Fiyi. En 1932, Douglas Fairbanks Sr. protagonizó Mr. Robinson Crusoe. Además, Mila Kunis fue la estrella de Boot Camp (2008), un thriller psicológico basado en una historia real, filmado en Fiyi.
La única película propia de Fiyi es The Land Has Eyes (2004) de Vilsoni Hereniko, que se lleva a cabo en Rotuma, y cuenta la historia de Viki, una muchacha cuyo padre es detenido injustamente por un robo. Su padre muere posteriormente de una enfermedad que contrajo después de trabajar arduamente para pagar su fianza. La trama juega con la mitología de la Mujer Guerrera y cómo ésta se convierte en un modelo para Viki y la ayuda a superar las adversidades.
A su vez, debido a la gran comunidad india en Fiyi, las películas de Bollywood son populares entre las audiencias, y muchas casas productoras de Bollywood se han interesado en invertir en una industria cinematográfica fiyiana. Esto crearía oportunidades de trabajo para los lugareños y promovería el turismo.
La ciudad capital de Suva
Fiyi es un archipiélago compuesto por varios grupos de islas: las Islas Yasawa, las Islas Lau, las Islas Moala, las Islas Mamanuca, los islotes de Ringgold y las islas principales: Viti Levu y Vanua Levu. La primera capital fue Levuka, en la isla Ovalau, establecida en 1877 después de que Fiyi se convirtió en una colonia británica, y fue trasladada a Suva en 1882. Esta ciudad vibrante y colorida tiene muchas cualidades que los visitantes pueden apreciar, desde experiencias espirituales relajantes hasta las aventuras más emocionantes. Suva es el hogar del Museo de Fiyi, en el corazón de los Jardines de Thurston; sus exposiciones incluyen reliquias arqueológicas y culturales que representan y buscan preservar el legado de los pueblos indígenas y colonos anteriores. A pocas cuadras, al norte de los Jardines de Thurston, encontramos la Catedral del Sagrado Corazón, la sede de la Arquidiócesis Católica de Suva. Fue construida en 1902, inspirada en la arquitectura romana. El Fiji Golf Club está situado en el suburbio de Vatuwaqa, construido en 1908; alberga un campo de golf de 18 hoyos, y abarca 16.7 hectáreas. Es un campo de golf público y los visitantes pueden competir por la Copa de Verano anual entre el 1ro de enero y el 31 de marzo.
Para explorar la naturaleza, la Reserva Forestal Colo-I-Suva ofrece una amplia variedad de actividades al aire libre que se centran en el senderismo, visitas guiadas, natación en piscinas naturales y avistamiento de aves con especies endémicas que no se encuentran en ningún otro lugar del mundo como el lori solitario (Phigys solitaries), el artamo de las Fiyi (Artamus mentalis), el monarca gorginegro (Clytorhynchus nigrogularis), el alción acollarado (Todiramphus chloris), el mielero pechinaranja (Myzomela jugularis), el pinzón loro de Fiyi (Erythrura Pealii), el silbador fiyiano (Pachycephala vitiensis), el tipolo multicolor (Ptilinopus perousii) y muchos otros.
La flor nacida de la melancolía
Debido a su naturaleza tropical, el Pacífico Sur tiene las condiciones perfectas para una rebosante flora. Fiyi tiene más de 300 especies endémicas y muchas otras que fueron introducidas de regiones cercanas como Tonga, Australia y Hawái. El bejuco de playa (ipomoea pes-caprae) se encuentra comúnmente adornando las arenas blancas de las costas de las islas, mientras que los hibiscos (hibiscus tiliaceus) se pueden apreciar en bosques, jardines y algunas playas. Fiyi también es rica en taro, palmas de coco, lirios de agua, buganvilias, flor de nochebuena, passiflora, frutipan, gardenia, Morera del papel, kava y muchos más.
Una de las especies endémicas de las islas es la Tagimoucia (Medinilla waterhousei), proclamada como la Flor Nacional por su singular apariencia y limitada existencia; crece en las regiones altas de la isla de Taveuni entre octubre y febrero, y no se encuentra en ningún otro lugar del mundo. La leyenda de su origen es sobre el amor y la angustia: una joven princesa estaba enamorada de un joven de la aldea, pero su padre la prometió a otro hombre. Desesperada, huyó al bosque, en lo alto de las montañas, donde encontró refugio y consuelo entre la vegetación de un lago cristalino y lloró toda la noche. Sus lágrimas cayeron al suelo y en su lugar crecieron flores rojas brillantes. Tanto las flores como el lago fueron nombrados Tagimoucia, que significa "llorar lágrimas de desesperación" en fiyiano. La historia tiene un final feliz; su padre, viendo la angustia de su hija, le permitió casarse con el joven y vivieron felices para siempre.
Taveuni: La Isla Jardín de Fiyi
La mayoría de los hoteles en la isla de Taveuni ofrecen excursiones guiadas hacia la montaña volcánica donde se encuentra el lago Tagimoucia para apreciar la flor, disfrutar de las maravillas de la naturaleza y actividades como avistamiento de aves y visitar las cascadas. El parque nacional de la herencia Bouma cubre alrededor de 150 km2 y protege la mayor parte de la selva tropical total de la isla. Ahí se encuentran las Cataratas Tavoro, un conjunto de tres encantadoras cascadas donde se puede nadar y explorar en los alrededores. Al otro lado de la isla, está el tobogán natural de Waitavala, en Waiyevo (el asentamiento más grande de la isla), donde se puede divertir –con precaución– deslizándose por la roca en la corriente de agua. El estrecho de Somosomo conecta Taveuni y Vanua Levu, y alberga la vida marina más vibrante de la región.
Las bellezas naturales de Fiyi
El archipiélago de Fiyi está lleno de imponentes formaciones naturales que los visitantes pueden disfrutar y descubrir. Un ejemplo de esto son las cascadas: la Cascada de Nakawaga, la Cascada de Savu-i-One, las Cascadas de Wainibau y la Cascada de Vuadomo. También puede apreciar la vista rocosa mientras se relaja en el Río Navua en Viti Levu, o puede explorar las cuevas que guardan muchos secretos esperando a ser descubiertos. Las Cuevas Sawa-I-Lau en las Islas Yasawa son un lugar mágico donde se puede nadar y explorar sus profundidades submarinas; las cuevas principales, bajas y secretas en Nadi, donde encontrará murciélagos, estalagmitas y estalactitas, y las Cuevas Naihehe, conocidas como las Cuevas Caníbales en Sigatoka, donde una tribu caníbal celebraba rituales. Las Cuevas de Oho en el pueblo de Tao también pertenecían a una tribu caníbal y fueron recientemente abiertas al público.
Un Universo Acuático
El parque acuático más popular de Fiyi es el parque acuático Big Bula en la isla de Denarau, con toboganes gigantes, olas de surf y zonas para niños. Sin embargo, en las playas podrá disfrutar de infinidad de aventuras donde podrá practicar buceo con tiburones y delfines, entre los arrecifes de coral, o practicar jetski, experimentar una moto acuática en la Isla del Tesoro, navegar en vela, rafting, buceo, kayak, mini golf, paravelismo, surf y mucho más.
Las islas ofrecen una gran infraestructura de puertos y marinas para visitar varias islas sin perder la comodidad del espacio privado de un yate o un catamarán. También puede adquirir artículos como equipos de sonido, pantallas y cámaras libres de impuestos, así como también cristal y porcelana. La vida nocturna de Fiyi se centra en Suva, la capital, que incluye clubes nocturnos, bares y restaurantes con música en vivo, pizzerías y un pub irlandés.
Fiyi es uno de los lugares más cautivadores del mundo que ofrece infinidad de diversión, aventura, momentos para compartir con la familia y amigos, y el romance. Siempre hay algo único que ofrecer, y cada isla del archipiélago de Fiyi le dará la bienvenida con los brazos abiertos y un cálido ¡Bula!
“Viviendo de manera tradicional, los fiyianos alcanzan la harmonía y la unidad entre ellos mismos.”
-Richard Katz, investigador
Texto: Ashanti Rojano ± Foto: WPD / YASAWA / EXPERIENCIES SUVA / ONE BIJE / AK0 / BP / LEES BIRD / DODLIVE / TAIPESCA / SPIC TH / LIGTH FOOT / ARKADIUS REJMAN / FIJI FOR / PATRICK SWAN / RYAN FOWLER / BLUE LAGOON CRUISES / WPA / ZIP FIJI / DABERMAN / AMAZING GF / AMYBOGER / DUFTY /MATTHIAS SUESSEN- / SOUTH SEA / MAXRESDEFAULT PUCP / RPA / OCHO / CLASSS CONEC / FITZ ROY / SNNY FIJI / SSC / KRAMPUS BOTANICALS / FIJI LUXURY / RADIO TIMES / RWD / Foto / Photo:ASALIKU / TRENDY / FUTURE BRAND / PINIMG / ETSY / PNI / PRINCETON/ NVALLLION / SRZ / PLAY GRD / PST / AK0 / ERWIN POLIAKOFF / Foto / Photo:IMAGES 8 / FROMNT GRAPENI / COOCCAN / OMG / HP SAFARI / JAN PEKA / PRINCETON / PINIMG / ROUS / MIKE ROBERTSON