Más de 4,000 monedas antiguas de bronce y plata pertenecientes al Imperio Romano, fueron halladas recientemente por un granjero en Suiza, quien había encontrado varias monedas de forma aislada, para después descubrir que se trataba de un auténtico tesoro enterrado en un campo de cerezos del municipio de Ueken.

El señor Loosli se encontraba lidiando con una madriguera cuando notó el hallazgo que se ha convertido en uno de los más importantes tesoros en Suiza. Las autoridades locales apuntan que se trata de 4,116 monedas que datan de la época del Emperador Aureliano (274 aC) y del Emperador Máximo (294 aC).

Las monedas se encuentran como nuevas, ya que fueron enterradas en sacos de cuero, por lo que se conservan intactas, además de que parece ser que fueron guardadas inmediatamente después de estar fuera de circulación.

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