Sin lugar a duda, uno de los mayores tesoros naturales de Suecia es la asombrosa costa escarpada de Bohuslän, un lugar único ubicado al norte de la ciudad de Gutemburgo y una de las 25 provincias históricas del país.
Atrapada entre el cielo y el mar, la costa de Bohuslän es trata de un destino para cualquier viajero que esté buscando disfrutar de momentos con uno mismo y el mar a través de sus mágicos pueblos pesqueros, como Mollösund, considerado el más antiguo y encantador al ofrecer a los visitantes un lugar plácido para viajar y degustar de la gastronomía en sus restaurantes.
Fiskebäckskil, a las orillas del fiordo de Gullmarn, es un destino turístico para pobladores y extranjeros, con sus pintorescas casas, sus embarcaciones ancladas y las exploraciones que llevan a encontrarse con un antiguo molino de viento que data de 1854.
Cuenta también con conectividad a través de un ferri para legar a Lysekil, una población que antiguamente fue un centro turístico termal y que aún mantiene algunas edificaciones de su pasado.