Con un desfile de los icónicos personajes de Lego, Legoland New York Resort y el parque temático Legoland New York, celebraron su primera temporada completa.
Ubicado en el valle de Hudson, se espera que Legoland New York Resort sea la joya de la corona del turismo para todo el estado neoyorquino. Localizado a unos pasos del parque temático Legoland New York, Legoland Resort ofrece 250 habitaciones con cuatro temáticas Lego a elegir: Pirates, Kingdom, Friends o Ninjago.
Como era de esperarse, en todas las instalaciones del hotel fueron colocadas figuras de Lego realizadas con millones de ladrillos de la marca. Incluso, a la entrada principal, un dragón Lego “recibe” a los visitantes con una bocanada de humo.
La espectacular entrada conduce al área de juegos del Castillo, la piscina, el salón, el restaurante Bricks, la sala de juegos, los modelos Lego y funciones interactivas ubicadas en todas partes. En el mostrador del concierge, en el vestíbulo, cuenta con una pared que exhibe más de 5,000 minifiguras de Lego.
“A medida que nos preparamos para nuestro primer año completo de operaciones, los desarrollos más emocionantes del hotel están inspirados en nuestros visitantes”.
Stephanie Johnson, directora de división de Legoland New York Resort.
Diversión en todas partes
La diversión está presente en los elevadores… al abordarlos, el sitio se convierte en un discoteca en movimiento, con luces localizadas en el techo que “bailan” al ritmo de la música mientras una bola “disco” gira, y los efectos de sonido anuncian su llegada al piso deseado.
Pensando en los jóvenes visitantes, cada suite tiene un área de dormitorio para niños con literas, una papelera Lego y una pantalla de televisión. Otra opción es el poder elegir entre habitaciones temáticas o temáticas premium, estas últimas tienen adicionalmente modelos y decoración Lego, como papel tapiz temático.
Como atractivo extra, cada habitación contiene un cofre del tesoro que los niños pueden desbloquear cada vez que completan una actividad especial de búsqueda de premios, encontrando pistas en toda la habitación.
Para comer están el Skyline Bar y restaurante Bricks, con los divertidos “chefs chiflados” de Lego que “preparan” comidas alocadas. Junto a la piscina está el Sandbar, para relajarse con una bebida y disfrutar del sol. Y para descansar, cuenta con una piscina de una profundidad máxima de 1.20 m, pensada en los niños.
Los jóvenes constructores pueden perfeccionar sus habilidades de construcción de ladrillos reservando una clase en el Master Model Builders, el taller creativo de Lego.