Desde hace más de 50 años, el Piaget Limelight Gala se ha erigido como un ícono de los cronómetros de lujo, combinando con maestría el arte de la alta joyería con la innovación relojera.

Sus curvas sensuales, asas asimétricas y la fusión de gemas y metales preciosos han convertido a esta colección en un símbolo de sofisticación atemporal. Este año, Piaget presenta dos nuevas creaciones Limelight Gala, con un diseño grabado en oro que rinde homenaje a su herencia como la "Casa de Oro".

Desde su fundación en 1874 en La Côte-aux-Fées, Suiza, Piaget ha sido sinónimo de innovación y artesanía inigualable. Inicialmente especializada en movimientos ultraplanos, la maison pronto expandió sus horizontes hacia la integración vertical, explorando técnicas de grabado, engaste de gemas y diseño de brazaletes. El resultado de esta evolución es la icónica técnica Decor Palace, que implica la meticulosa soldadura de casi mil eslabones a mano, logrando una superficie metálica fluida y sin fisuras.

Las nuevas versiones del Limelight Gala mantienen la esencia de la colección, pero incorporan un exquisito motivo grabado a mano en la esfera y el brazalete, que evoca la textura de la seda en movimiento. Cada pieza es trabajada por un maestro grabador durante dos días completos, asegurando una continuidad impecable en el diseño.

El primer ejemplar es una obra maestra de oro blanco, enmarcado por 42 diamantes blancos de 4.74 quilates. Por su parte, el modelo Mesmerizing Burgundy resplandece con un esmalte Grand Feu en un profundo tono burdeos, realzado por un degradado de gemas que incluye diamantes, zafiros rosa pálido y rubíes de un rojo intenso. Esta combinación de colores rinde homenaje a la tradición de Piaget en el uso de piedras ornamentales y su capacidad de innovar en la relojería cromática.

 

Inspiración en el glamour de los años 70

Piaget ha estado íntimamente ligado al espíritu festivo y glamuroso de la "Piaget Society", un exclusivo círculo de celebridades y artistas que definieron la estética de los años 70. Figuras como Gina Lollobrigida, Elizabeth Taylor y Andy Warhol fueron algunos de sus embajadores, y sus estilos opulentos continúan inspirando las creaciones de la maison.

Limelight Gala no es solo un guardatiempos, sino una declaración de arte y exclusividad, una pieza que trasciende el tiempo y redefine el concepto de la alta relojería.