Mercedes-Benz ha entrado en una nueva era de diseño icónico. Representando esta evolución, el auto de exhibición Vision Iconic encarna la libertad de pensar más allá de lo convencional, como un impulso creativo que abre nuevas perspectivas y construye un puente entre el pasado y el futuro.
Además de una presencia opulenta y atemporal, una característica central es la reinterpretación de uno de los elementos más reconocibles de la historia del automóvil: la icónica parrilla del radiador de Mercedes-Benz. Esta parrilla, conocida como icónica, presentada por primera vez con el nuevo GLC eléctrico, expresa emoción e inteligencia, y permite a Mercedes-Benz destacar entre la monotonía.
La parrilla se inspira en las parrillas verticales de modelos legendarios como el W 108, el W 111 y el Mercedes-Benz 600 Pullman. Con su amplio marco cromado, una estructura de celosía de cristal ahumado y la iluminación de contorno integrada, la icónica parrilla fusiona la tradición con la modernidad digital. Irradia presencia, estatus y un fuerte sentido de la identidad Mercedes-Benz.
Esta nueva imagen de la marca se presentó por primera vez con el nuevo GLC eléctrico en septiembre de 2025. Vision Iconic refuerza esta sólida presencia iluminando incluso la estrella vertical del capó.
El distintivo diseño frontal se enriquece con faros estilizados, equipados con la última tecnología de iluminación. El acabado de pintura negro intenso de alto brillo realza el escultural diseño exterior del prototipo.
Con la conducción automatizada, el papel del interior del vehículo está evolucionando. El Vision Iconic ofrece un vistazo a este futuro, caracterizado por un confort similar al de un salón y una experiencia completamente nueva de lujo hiperanalógico y digital. El interior del Vision Iconic redefine la elegancia automotriz mediante una opulenta composición de inspiración Art Déco, con la más fina artesanía y materiales exclusivos.
La pieza central del panel de instrumentos es una estructura de cristal flotante, el llamado "Zeppelin", una forma escultural que revela un interior cautivador con detalles ingeniosos y una refinada interacción de instrumentos analógicos y digitales.
Al abrir la puerta, el cuadro de instrumentos cobra vida con una animación cinematográfica, totalmente analógica, inspirada en los cronógrafos de alta gama. El concepto de pantalla de pilar a pilar integra la tecnología a la perfección en el interior. En el centro, uno de los cuatro relojes tiene la forma del logotipo de la marca, actuando como un compañero de inteligencia artificial.
Tras el Zeppelin, una generosa superficie decorativa se despliega en una impresionante incrustación de lustroso aspecto nácar, que ofrece profundidad visual y delicadeza artesanal. Una intrincada marquetería de nácar también adorna los paneles de las puertas, rodeando las manijas de latón finamente elaboradas y pulidas en tonos plata y oro, antes de fluir hacia un radiante patrón de estrellas que enmarca el asiento trasero con elegancia.
Conductor y pasajero pueden compartir el espacioso y suntuoso asiento delantero corrido en terciopelo azul intenso, lo que fomenta una sensación de relajación conjunta y una experiencia de lujo.
Delante del conductor, el volante de cuatro radios realza un carácter deportivo y elegante. El logotipo de Mercedes-Benz flota dentro de una esfera de cristal, sujeta por los radios como una joya. El suelo del vehículo está revestido con una elaborada marquetería de paja, una lujosa técnica decorativa que data del siglo XVII y fue recuperada en la década de 1920. Con un clásico motivo Art Déco en forma de abanico, este acabado artesanal traslada el arte histórico a la era moderna.
Recubrimiento solar innovador para mayor autonomía
Mercedes-Benz investiga módulos solares innovadores que podrían aplicarse sin problemas a la carrocería de los vehículos eléctricos, de forma similar a una pasta finísima. La superficie fotovoltaica activa podría adaptarse a diversos sustratos.
Al aplicarse a toda la superficie del Iconic Vision, se podría aprovechar la autonomía solar adicional, dependiendo de la ubicación geográfica y las condiciones locales. Por ejemplo, un área de 11 metros cuadrados (equivalente a la superficie de un SUV mediano) podría producir energía para hasta 12,000 km al año en condiciones ideales.
El recubrimiento no contiene tierras raras ni silicio y es fácilmente reciclable. Las células solares tienen una alta eficiencia del 20% y generan energía de forma continua, incluso con el vehículo apagado.
Los futuros modelos de vehículos, como el Vision Iconic, incorporarán cada vez más funcionalidades, como la conducción autónoma. Esto conllevará un consumo energético significativamente mayor. Por lo tanto, la eficiencia es un factor crucial. Con su investigación en redes neuronales artificiales, Mercedes-Benz está abriendo nuevos caminos en el desarrollo de arquitecturas informáticas junto con socios de los sectores de la investigación y la industria.
La computación neuromórfica imita el funcionamiento del cerebro humano. Esto podría hacer que los cálculos de IA sean significativamente más eficientes y rápidos energéticamente. Los sistemas de seguridad, por ejemplo, podrían reconocer mejor las señales de tráfico, los carriles y a otros usuarios de la vía, y reaccionar con mayor rapidez, incluso en condiciones de poca visibilidad, siendo 10 veces más eficientes que los sistemas actuales.
La computación neuromórfica tiene el potencial de reducir el consumo energético para el procesamiento de datos en la conducción autónoma en un 90% en comparación con los sistemas actuales.
Un nuevo tipo de viaje.
Como auténtico pionero, Mercedes-Benz se sitúa a la vanguardia del desarrollo de sistemas de conducción asistida y automatizada. Gracias al sofisticado enfoque basado en la seguridad, el Vision Iconic incluye de serie capacidades urbanas punto a punto de Nivel 2 mejoradas.
Con este sistema, Mercedes-Benz ofrece una gestión experta de situaciones de tráfico urbano complejas, con dirección y aceleración cooperativas como característica única. Ayuda al conductor a circular por las calles concurridas de las ciudades más grandes del mundo. El siguiente paso lógico en el desarrollo de la conducción autónoma condicional sería equipar un vehículo como el Vision Iconic con un sistema de conducción altamente automatizada de Nivel 4.
Tras entrar en la autopista y activar el sistema de Nivel 4, el conductor podría aprovechar el tiempo para relajarse sin tener que lidiar con el tráfico. También sería posible una siesta o relajarse mientras se reproduce el vídeo más popular, con una experiencia inmersiva de sonido e iluminación ambiental. El vehículo se convierte en un lujoso salón.
La dirección electrónica reduce aún más el esfuerzo necesario y elimina la necesidad de volver a sujetar el volante al aparcar. Esta tecnología no requiere una conexión mecánica entre el volante y las ruedas delanteras. En su lugar, las órdenes de dirección del conductor se transmiten de forma rápida y eléctrica a través de unidades de control y actuadores.