Una novedad Pre Basel 2016 esperada para apreciarse debido a su particular estética y “corazón abierto”, así como la combinación de sus materiales, es el Girard-Perregaux 1966 Skeleton.
De un gusto equilibrado estéticamente, más allá de un público femenino o masculino, este reloj tiene todo lo que puede admirarse de la relojería tradicional en nuestros días; ya que descubre en justa medida la mecánica del mismo, con una profundidad que permite adentrarse en el alma de una time machine.
Con 173 componentes, cuyas joyas incluyen 25 rubíes, 1966 Skeleton impacta con su órgano de regulación que oscila rápidamente con una inercia denominada “microvar” de variable equilibrante; este movimiento ha sido definido exclusivamente por Girard-Perregaux y el mismo ejecuta pulsaciones en 4 Hz (28,800 vibraciones p/h).