Silencioso como el vuelo de una mariposa, así será el desplazamiento de Butterfly, un avión de vuelo vertical y sin emisiones.

Diseñado por Overair, desarrollador de aeronaves eléctricas de despegue y aterrizaje vertical (eVTOL), Butterfly será cero emisiones de carbono y un bajo nivel de ruido, capaz de transportar a cinco pasajeros en un rango de 160 km, a una velocidad máxima de 320 km/h, sin importar las condiciones climáticas.

Para fabricarlo, Overair se asoció con Bristow, con más de 70 años de experiencia en aviación, para desarrollar las consideraciones de diseño de la aeronave de vuelo vertical, los parámetros clave de rendimiento, los planes de certificación ante la Administración Federal de Aviación de Estados Unidos (FAA, por sus siglas en inglés), las mejores prácticas de proyección de viajes y otras áreas que favorecerán el introducir a Butterfly de manera segura y eficiente en el mercado.

Ambas compañías explorarán rutas comerciales de taxis en rutas nuevas y emergentes para las operaciones de Bristow, como lo realiza en la actualidad con organizaciones gubernamentales y civiles en diversas ubicaciones geográficas de alta densidad.

Bristow ha reservado entre 20 y 50 Butterfly, y juntas, las compañías crearán un marco de desarrollo de operaciones centrado en el diseño del avión, intercambio de datos para mejorar las procedimientos de los viajes, conectividad, protocolos de configuración y mantenimiento, infraestructura, actividades de soporte en tierra, administración de la flota y asuntos gubernamentales.

Bristow, uno de los operadores de helicópteros más grandes y experimentados del mundo, piensa anexar el Butterfly y otros eVTOL en rutas de taxi aéreo en áreas metropolitanas. En particular, de las aeronaves que Bristow está considerando actualmente, Butterfly es el único avión con una configuración de empuje vectorial (capacidad de dirigir el empuje del motor en una dirección distinta a la paralela al eje longitudinal del vehículo).

Con la experiencia de Overair en el desarrollo de sistemas de propulsión de helicópteros de grado militar, se espera una colaboración altamente estratégica entre ambas empresas. El trabajo ya comenzó, centrándose en la planificación de la certificación ante la FAA, una sólida cultura operativa de seguridad y otros aspectos únicos en las operaciones de vuelos verticales.