En una rediseñada caja Aikon, Maurice Lacroix instaló un calibre automático esqueletizado de manufactura, para dar forma al Aikon Automatic Skeleton.
Inspirado en el Calypso Squelette, la primera colección de ML en estilo esqueletizado lanzada en 1993, la firma se convirtió en pionera de esta modalidad. Con un espíritu de creación contemporánea, ML convirtió al Aikon Automatic en un compendio de numerosas innovaciones.
La actualizada caja de grandes dimensiones, alberga un nuevo movimiento, el calibre de manufactura ML234. Su mecánica, visible a través de la carátula esqueletizada, sigue un principio gráfico completamente nuevo, creado especialmente para esta pieza. En el Aikon Automatic confluyen dos familias de relojes ML, siendo un híbrido entre el diseño del Aikon y la cultura de alta relojería de la colección Masterpiece.
Basado en el Aikon de 2016, la caja del Aikon Automatic mide 45 mm de diámetro y 13 mm de grosor.
Fuerte como el acero
La caja, tallada a partir de un bloque de acero, satinado y pulido de manera alternada, se distingue por su bisel salteado de índices móviles cada dos horas, un rasgo estético distintivo de la colección. Otro elemento característico es la forma de la caja, integrada, sin asas y marcada por dos protuberancias que inician la curva de la correa.
Con este modelo, ML devela el sistema Easychange, que consiste en anclajes rápidos que permiten cambiar la correa a una mano en cuestión de segundos. A la altura de la caja, la correa presenta unos recortes para anclar dos pequeños ganchos que accionan los muelles del pasador. Así se desconecta el brazalete negra de piel de caimán, dotada de un cierre que permite ajustar fácilmente la longitud de la correa.
Como una onda en un estanque
El calibre ML234, diseñado especialmente para el Aikon Automatic, es un movimiento de cuerda automática, resultado de una profunda evolución estética y estructural del calibre ML134, una de las primeras creaciones de la manufactura ML.
El movimiento se estructura en torno a cinco círculos concéntricos que recorren el reloj. Puente tras puente, parten desde el centro del barrilete, situado a la 1, con la superficie de color negro con tratamiento DLC; la parte central es hueca y granallada, con contornos realizados en relieve y satinados.
La masa oscilante, visible a través de la parte trasera del movimiento, adopta una nueva estética, calada al máximo y en la que aparece, en bajorrelieve, el logotipo de la marca. Encima de esta obra de encaje mecánico, una esfera de zafiro transparente cuenta sus índices rodiados y sirve de lienzo al pequeño segundero, situado a las 6 horas.