Con motivo de la celebración del primer ascenso al Mont Blanc en 1786, la firma Montblanc creó una edición limitada de ocho relojes Montblanc Star Legacy Exo Tourbillon Skeleton, The Ascent.

Los guardatiempos cuentan con una nueva arquitectura de movimiento y adornos realizados a mano tanto en la carátula como en el movimiento. En la carátula aparece la representación de Wyvern, la mítica criatura que supuestamente vivía en el glaciar Mer de Glace del Mont Blanc.

La historia del primer ascenso al Mont Blanc representa el coraje, curiosidad, ambición y acción. Según la leyenda local, peligrosas criaturas míticas la habitaban, lo que impedía llegar al pico de 4,810 m. Sin embargo, cuando en 1760 el naturalista Horace-Bénédict De Saussure ofreció un premio sustancial a la primera persona que hiciera cima, el interés creció considerablemente.

Después de numerosos intentos infructuosos, un joven y ambicioso cazador y buscador de oro, Jacques Balmat, contrató a Michel-Gabriel Paccard, un médico apasionado de la botánica y los minerales, para ayudarle a encontrar una ruta hasta la cumbre. A las 18:23 del 8 de agosto de 1786, la pareja hizo historia alcanzando la cima un siglo antes de que la palabra “alpinista” apareciera en el diccionario. Un año más tarde, el dúo regresó con De Saussure para que pudiera conquistar la montaña más alta de Europa occidental.

Para celebrar el histórico acontecimiento, Montblanc creó el modelo, que tiene grabado a mano el Mont Blanc en la subcarátula, a las doce en punto; a la izquierda, en oro blanco de 18 quilates la figura de Balmat escalando, y a la derecha la representación de Wyvern.

En el histórico ascenso, Balmat y Paccard llevaron un “cianómetro”, para medir la intensidad del color del cielo. En homenaje a este invento, el reloj cuenta con un cianómetro que recorre la periferia de la caja tourbillon e indica los diversos tonos del cielo azul.

La caja de 44.8 mm es de oro blanco de 18 quilates pulido, con cristal de zafiro abombado con doble revestimiento antirreflejante.

 

Amura,AmuraWorld,AmuraYachts, El movimiento incluye 420 ángulos internos, todos ellos pulidos a mano. El movimiento incluye 420 ángulos internos, todos ellos pulidos a mano.

 

Lleno de detalles

La complicación patentada Exo Tourbillon, presentada en 2010, es uno de los pilares de la colección de relojes Montblanc. Se basa en posicionar el volante grande, que tiene la frecuencia baja tradicional de 18,000 oscilaciones, fuera de la estructura de rotación del tourbillon (lo cual explica el término “Exo”).

Este gran volante está 3.2 mm más alto que la carátula, simulando que “flota” sobre ella; esta posición suspendida es posible gracias al puente tourbillon de un brazo curvado que crea un efecto tridimensional y una estética de alta relojería.

Los ingenieros de Montblanc trabajaron durante más de 12 meses para concebir un nuevo movimiento troquelado (además de los tres años de I+D), a fin de aumentar la luminosidad, reimaginar el diseño y la geometría, y comprobar la estabilidad de cada elemento.

Los 188 componentes de gran complejidad, incluidos cinco pilares de apoyo entre la placa base y los puentes, están alineados para permitir que entre la luz. Como resultado, una composición de líneas puras y delicadas, algunas tan finas como el encaje, magnifican el tourbillon hipnotizador a medida que esta gira. Es poco frecuente ver un movimiento completo en funcionamiento desde 360 grados, como se puede apreciar es el calibre suspendido.

El movimiento MB M18.69 de la manufactura Montblanc incluye 420 ángulos internos, todos ellos pulidos a mano, una acción difícil debido a la dificultad del acceso. Es imposible pulirlos con máquina; solo una mano experta puede mostrar la belleza del ángulo interno. En Villeret, Suiza, cada artesano tiene sus propias técnicas, a menudo usando tallos de flores alpinas locales, como la genciana, en busca del ángulo pulido.