Al iniciar el Año Nuevo chino, Parmigiani Fleurier presentó el modelo Tonda PF Xiali, con el primer calendario chino jamás fabricado.

Este nuevo calendario completo Tonda PF Xiali sucede al gregoriano anual Tonda PF y al árabe Hijiri Tonda PF lanzado recientemente por Parmigiani Fleurier. Más que un calendario, Xiali es una oda a los calendarios y civilizaciones del mundo a través del arte mecánico suizo tan querido por Parmigiani Fleurier desde su fundación. Con toda la poesía y la cultura que representa, Xiali toma su nombre de la traducción de “Calendario completo tradicional chino”.

“Los calendarios son una radiografía de las civilizaciones. Es algo mágico porque el calendario surge de la observación tanto de los humanos como de la naturaleza. La naturaleza está llena de códigos que son hermosos de descubrir”.

Michel Parmigiani, Fundador y Maestro Relojero.

El fondo de la caja permite ver el movimiento y las decoraciones a través de un cristal de zafiro.

Para Michel Parmigiani, al observar la naturaleza, uno puede viajar a través de la historia y rastrear el desarrollo de las civilizaciones. “Pienso en las culturas maya y tolteca, que tenían calendarios muy parecidos al chino. Nacieron de la necesidad de entender las estaciones de la naturaleza, de planificar los tiempos de siembra y de cosecha, de anticipar y gestionar el frío del invierno y el calor del verano. Existen porque necesitamos anticiparnos a los fenómenos del cuidado de la naturaleza”.

El calendario chino es complejo, ya que combina elementos del calendario solar y lunar, que se calculan por separado y luego se sincronizan. Esto se logra mediante la adición de un mes lunar o intercalado adicional. Este mes 13, que permite que los dos ciclos coincidan, ocurre aproximadamente cada tres años. Finalmente, el calendario chino divide el año solar en 24 términos solares, o respiraciones, que simbolizan el calendario agrícola.

El Año Nuevo aparece según reglas precisas y toma el nombre del mes que le precede. El cálculo es complejo pero permite seguir las estaciones y fijar el Año Nuevo chino en la llegada de la primavera, que varía entre finales de enero y finales de febrero en nuestro calendario, entre el 21 de enero y el 19 de febrero.

A diferencia del calendario gregoriano, que nombra los meses y numera los años, el chino nombra los años lunares y numera los meses. Los nombres de los años se repiten en un ciclo de 60 años (sexagesimal), pero el calendario que incluye fechas, días y meses se calcula sobre la base de observaciones astronómicas, y varía.

Debido a que estos cálculos varían, es imposible hacer un calendario chino “perpetuo”. Sin embargo, la creación de Parmigiani Fleurier va más allá al crear el calendario chino más completo y preciso en forma de reloj. El sistema de numeración de las unidades de tiempo se basa en la combinación de un ciclo decimal, los diez Tallos Celestiales, y un ciclo duodecimal, las doce Ramas Terrestres.

Los 10 Tallos Celestiales cumplen la función de asignar elementos a las estaciones y los planetas: agua, madera, metal, fuego y tierra. Las 12 Ramas Terrestres corresponden a los signos del zodíaco: cada una está representada por un animal, que designa los años del ciclo sexagesimal e influirá en el destino y carácter de los seres humanos nacidos en ese año.

Parmigiani Fleurier ha logrado condensar toda esta compleja información en una esfera: horas y minutos; la visualización del mes y su numeración; un mes adicional cuando corresponda (es decir, cada tres años); mes corto (29 días) o mes largo (30 días); términos solares correspondientes a 24 divisiones de 15° de la trayectoria del sol a lo largo de la eclíptica (la trayectoria del sol vista desde la tierra); puntero y nombre del año; indicación del animal y los elementos con colores alternos, ya sea Yin o Yang; Numeración de los días y fases lunares. Toda la información y los ajustes se realizan rápidamente gracias a los distintos correctores situados a ambos lados del centro de la caja.

El reloj esconde un mecanismo extremadamente sofisticado en el nuevo movimiento, Calibre PF008, que permite la visualización de estos datos en los caracteres chinos clásicos. Como el calendario chino no es cíclico, la complicación se programa mecánicamente y cubre un período de 12 años a través de un sistema de levas. Al final de estos doce años, el reloj debe reiniciarse por un nuevo período equivalente. Durante este período, toda la información permanece precisa sin necesidad de ninguna intervención, siempre que el reloj no se detenga. Si el reloj está detenido, puede realizarse correcciones simplemente cambiando el número de día y mes con un corrector rápido que facilita los ajustes en períodos prolongados.

Este no es el primer éxito de Parmigiani Fleurier al replicar las poéticas y distintivas complicaciones del calendario cuyos elementos han inspirado durante mucho tiempo a Michel Parmigiani a alcanzar nuevas alturas relojeras. Primero fue el calendario Anual Gregoriano, seguido en 2019 por el calendario Perpetuo Tonda Hijri, o calendario musulmán, una hazaña de miniaturización que fue galardonada con el Grand Prix D'Horlogerie de Genève (GPHG) en la categoría de Innovación en 2020. El Calendario Chino, que sucede a estas obras maestras anteriores, permite a la Casa ofrecer una trilogía de calendario excepcional.

La esfera de varios niveles, con aplicaciones de oro blanco de 18 quilates chapado en rodio y manecillas de horas y minutos esqueletizadas, está ejecutada en rojo imperial con un patrón guilloché de “grano de cebada” que realza su superficie.

La caja de acero inoxidable tiene un bisel estriado en platino 950, y el brazalete integrado, en el mismo material. El fondo de la caja permite revelar el movimiento y sus decoraciones a través de un cristal de zafiro. El acabado Côtes de Genève y la masa oscilante esqueletizada en oro rosa de 18 quilates aportan ligereza.

Costo: 64,000 dólares.