Bombardier, el fabricante canadiense de jets, presentó los avances de su proyecto EcoJet, que tiene como objetivo desarrollar tecnologías para disminuir las emisiones de los aviones a través de una combinación de aerodinámica avanzada y mejoras en la propulsión.
Después de varios años de investigación, la compañía completó su primera fase de prueba con un modelo a pequeña escala de un jet de fuselaje combinado con alas, que representa aproximadamente el 7% tamaño de un gran business jet. Con el conocimiento adquirido, Bombardier iniciará una segunda fase de prueba con un modelo dos veces más grande, para allanar el camino para una próxima campaña de pruebas.
“Bombardier ha tomado una posición de liderazgo en los esfuerzos de la industria para reducir su huella ambiental, y el proyecto de investigación EcoJet es fundamental para desarrollar las tecnologías que nos llevarán hacia la meta de cero emisiones netas para 2050”.
Stephen McCullough, vicepresidente sénior de Ingeniería y Desarrollo de Producto de Bombardier.
El equipo de Bombardier obtuvo resultados muy positivos durante los bucles de optimización del diseño y las pruebas de vuelo. Estos incluyen el despliegue de una plataforma de gestión del ciclo de vida del producto (PLM) de próxima generación, la confirmación de una capacidad de modelado de ala transónica de sexta generación y la demostración de una nueva arquitectura de control de las aeronaves.
Este programa de investigación y tecnología tiene como propósito aminorar las emisiones de los aviones hasta en un 50% mediante una mezcla de mejoras aerodinámicas y de propulsión. Bombardier creó el proyecto de investigación EcoJet para desplegar y madurar las tecnologías para aprovecharlas en el futuro, como parte de su compromiso de una aviación comercial sostenible.
En los últimos tres años, Bombardier publicó las Declaraciones Ambientales de Producto (EPD) para sus aeronaves Challenger 3500, Global 5500, Global 6500 y Global 7500. Esta información es el resultado de años de esfuerzos científicos y está destinada a actuar como herramientas para que la industria de la aviación impulse innovaciones sostenibles en todo su espectro de actividades.
Bombardier también está empleando combustible de aviación sostenible (SAF), en una mezcla del 30%, para cubrir la totalidad de sus vuelos, utilizando el sistema Book-and-Claim. La iniciativa generará una ganancia significativa al reducir las emisiones anuales de gases de efecto invernadero asociadas con el combustible utilizado en las operaciones de vuelo de Bombardier en aproximadamente un 25%.