Un habitante único y especial de los manglares, selvas tropicales y riberas de los ríos de Brunéi es sin duda el mono narigudo, una especie endémica de la isla de Borneo.
Su distintiva nariz, grande y colgante (de ahí su nombre científico Nasalis larvatus –nasalis proviene del latín que significa nariz–), especialmente prominente en los machos, puede alcanzar hasta 10 centímetros de longitud y colgar sobre su boca. Aunque la función exacta de este prominente órgano no está completamente definida, se cree que juega un papel importante en la comunicación y la selección sexual, atrayendo a las hembras.
Además de su nariz, el mono narigudo se caracteriza por su pelaje de color marrón rojizo, que se torna más pálido en el abdomen. Los machos alcanzan un peso de hasta 24 kg, mientras que las hembras rara vez superan los 12 kg; son diurnos y pasan la mayor parte de su vida en los árboles. Viven en grupos sociales que varían en tamaño, generalmente compuestos por un macho dominante, varias hembras y sus crías.
Su dieta se basa principalmente en hojas, frutas y semillas, adaptándose a la disponibilidad estacional de estos recursos en la selva tropical y los manglares de Borneo.
A salvo en Brunéi
Afortunadamente, su hábitat se mantiene en su mayoría intacto en Brunéi, en gran parte por tener esa nación una economía basada en el petróleo y el gas, que reduce la necesidad de deforestar grandes áreas para la agricultura o el desarrollo urbano. Por ello, los bosques de Brunéi proporcionan un refugio vital para el mono narigudo y otras especies, especialmente las que habitan en el Parque Nacional de Ulu Temburong de 550 km2 de selva virgen.
Aunque prefiere las zonas costeras y los manglares, la conservación de áreas interiores como Ulu Temburong ayuda a mantener la salud general del ecosistema, beneficiando indirectamente a todas las especies de la región, incluido el orangután. Otro sitio protegido es la Reserva Forestal de Sungai Liang, que incluye importantes hábitats de manglar, donde los monos narigudos tienen refugio y alimento.
Instituciones de Brunéi, en colaboración con organizaciones internacionales, llevan a cabo estudios sobre la ecología y el comportamiento de estos primates, y a través de programas educativos y de sensibilización se informa a la población local sobre la importancia del mono narigudo y su hábitat. Estas iniciativas buscan fomentar un sentido de orgullo y responsabilidad hacia la conservación de su biodiversidad única, reportó las Universidades de Cardiff y Yale, que ahí realizan estudios de la especie.
Turismo sostenible
Como resultado de la salvaguarda, el turismo sostenible se ha convertido en una herramienta importante para la conservación en Brunéi. Al atraer a turistas interesados en la naturaleza y la biodiversidad, los bruneanos tienen una fuente alternativa de ingresos y no dependen de la explotación de los recursos naturales.
Sitios como la Reserva Forestal de Sungai Liang y las excursiones guiadas por los manglares brindan oportunidades para que los visitantes observen de cerca a los monos narigudos en su entorno natural. El gobierno y las empresas locales están trabajando para asegurar que el turismo se desarrolle de manera sostenible, minimizando el impacto ambiental.
La principal amenaza para esta especie es la pérdida de su hábitat debido a la expansión urbana y el desarrollo de infraestructura. Otro factor en contra es el cambio climático que afecta los hábitats de manglares y selvas. En el resto de la isla de Borneo –perteneciente a Malasia e Indonesia–, está catalogado como "en peligro" por la Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza (UICN), especialmente por su captura ilegal para convertirlos en mascotas.
Texto: Amura ± Foto: Adobe Stock