El Programa de las Naciones Unidas para el Medio Ambiente (PNUMA) y la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO) han designado las primeras World Restoration Flagship 2025, que abordan la contaminación, la explotación insostenible y las especies invasoras en tres continentes.

Estas iniciativas están restaurando casi cinco millones de hectáreas (ha) de ecosistemas marinos, un área aproximadamente del tamaño de Costa Rica.

Los tres nuevos proyectos insignia abarcan iniciativas de restauración en la región del Canal del Norte de Mozambique, rica en corales, más de 60 islas de México y el Mar Menor en España, el primer ecosistema europeo con personalidad jurídica.

Los premios reconocen iniciativas destacadas que apoyan los compromisos globales de restaurar mil millones de ha (superficie mayor que la de China) para 2030.

 

 

Islas de aves marinas de México

Reconocidas mundialmente como puntos críticos para la biodiversidad, en particular por albergar a un tercio de las especies de aves marinas del mundo, las islas mexicanas han sufrido durante mucho tiempo los impactos negativos de las especies invasoras.

Luego, hace veintiséis años, la Comisión Nacional de Áreas Naturales Protegidas de México (CONANP) y la organización de la sociedad civil Grupo de Ecología y Conservación de Islas (GECI) lanzaron un ambicioso e integral programa de restauración ecológica, en colaboración con socios de agencias gubernamentales, la sociedad civil, la academia y las comunidades locales.

Las iniciativas incluyen la eliminación de 60 poblaciones de especies invasoras y la restauración de colonias de aves marinas [foto inicial], así como la restauración del paisaje forestal. Junto con la implementación de protocolos de bioseguridad, el programa integral restaura la riqueza endémica de la isla y apoya a las comunidades isleñas locales.

Gracias a las iniciativas de restauración, el 85% de las colonias de aves marinas extinguidas han regresado a las islas, incluyendo especies en peligro de extinción. La iniciativa completará la restauración de más de 100,000 ha para finales de la década –equivalente a casi un millón de ha de tierra continental en términos de valor para la biodiversidad–, abarcando casi 100 islas y protegiendo más de 300 especies endémicas de mamíferos, aves y reptiles.

 

El canal del norte de Mozambique

Esta pequeña región alberga el 35% de los arrecifes de coral de todo el océano Índico y se considera su semillero y vivero. La escorrentía agrícola, la sobrepesca y el cambio climático amenazan esta importante franja oceánica, tanto económica como ecológicamente.

Comoras, Madagascar, Mozambique y Tanzania ya están trabajando juntos para gestionar, proteger y restaurar casi 87.200 ha de paisajes terrestres y marinos interconectados, beneficiando tanto a la naturaleza como a las personas.

Las acciones emprendidas hoy para mantenerlo incluyen la restauración de los bosques azules y verdes mediante la creación de corredores de restauración interconectados, manglares y ecosistemas de arrecifes de coral, y la mejora de la gestión pesquera. Estos esfuerzos, impulsados por la ONG Fondo Mundial para la Naturaleza (WWF) y agencias de la ONU por igual, abarcan múltiples niveles y sitios, abarcando tanto paisajes terrestres como marinos.

 

España: La laguna del Mar Menor

Con sus famosas aguas transparentes, la laguna del Mar Menor es esencial para la identidad de la región, el turismo local, la pesca artesanal y una flora y fauna únicas, incluyendo aves acuáticas. Rodeada por una de las principales regiones agrícolas de Europa, es la laguna de agua salada más grande del continente, y su biodiversidad se ha adaptado con éxito a condiciones de temperaturas extremas, alta salinidad y bajos niveles de nutrientes.