El Día de la Tierra demanda cada 22 de abril la atención sobre el medio ambiente y promueve la conservación y la sostenibilidad.

Este año, el tema global de Día de la Tierra es 'Planeta vs. Plásticos', que reconoce la amenaza que representan los plásticos para la salud humana y exigir una reducción del 60% en la producción de plásticos para 2040, comentan Lindsey Ricker y Hanh Nguyen del Foro Económico Mundial.

Las campañas y proyectos oficiales del Día de la Tierra tienen como objetivo aumentar la “alfabetización ambiental” y reunir a personas o grupos con ideas afines para abordar cuestiones como la deforestación, la pérdida de biodiversidad y otros desafíos. Como parte de las acciones, del 23 al 29 de abril de 2024, gobiernos y ONG de todo el mundo se reunirán en Ottawa para continuar negociando el Tratado Global del Plástico de las Naciones Unidas (NU).

 

¿Cómo empezó el Día de la Tierra?

Haciendo un poco de historia, el 22 de abril de 1970, millones de personas salieron a las calles en Estados Unidos en protestas masivas por el daño provocado al planeta. El impacto ambiental del boom consumista de la posguerra comenzaba a sentirse en ese momento. Los derrames de petróleo, la contaminación de las fábricas y otras amenazas ecológicas iban en aumento, y había poca o ninguna legislación para prevenirlos

En 1990, alrededor de 200 millones de personas en 141 países unieron esfuerzos para impulsar el reciclaje en todo el mundo, allanando el camino para la Conferencia de las NU sobre el Medio Ambiente y el Desarrollo de 1992, en Río de Janeiro, Brasil.

Esta “Cumbre de la Tierra”, como se la conoció, condujo a la formación de la Convención de las NU sobre el Cambio Climático y el Convenio de las NU sobre la Diversidad Biológica, junto con la Comisión sobre Desarrollo Sostenible para monitorear e informar sobre la implementación de los acuerdos de la Cumbre de la Tierra.

 

¿Por qué es importante hoy el Día de la Tierra?

A medida que se acercaba el milenio, el movimiento del Día de la Tierra centró su atención en la creciente realidad de la inminente crisis climática con un mensaje claro para los líderes y las empresas mundiales: se necesitan medidas urgentes para abordar el calentamiento global.

El último informe del Panel Intergubernamental sobre Cambio Climático afirma que, si no se toman más medidas inmediatas para frenar las emisiones de gases de efecto invernadero, el mundo va camino de alcanzar temperaturas 3.2 °C, superiores a los niveles preindustriales para 2100. Este nivel de calentamiento resultará catastrófico para el planeta y toda la vida en él.

 

El 2023 fue el más caluroso jamás registrado

El Informe de Riesgos Globales 2024 del FEM encuentra que los riesgos ambientales representan la mitad de los 10 principales riesgos durante los próximos 10 años, siendo tres principales eventos climáticos extremos: cambios críticos en los sistemas de la Tierra, pérdida de biodiversidad y colapso de los ecosistemas.

La naturaleza ha frenado el calentamiento global al absorber el 54% de las emisiones de dióxido de carbono relacionadas con el hombre en los últimos 10 años. Sin embargo, estamos perdiendo animales, especies marinas, plantas e insectos a un ritmo sin precedentes, no visto en 10 millones de años. Las amenazas de la actividad humana a la producción de alimentos y el uso de los océanos, la infraestructura, la energía y la minería ponen en peligro alrededor del 80% de todas las especies amenazadas o casi amenazadas.

Al celebrar su 54º aniversario, debemos aprovechar este movimiento para actuar, como ciudadanos y gobiernos, como consumidores y empresas, y como individuos y comunidades. Nuestra supervivencia bien podría depender de ello.