De los sommeliers de café
La Cultura se define por aquello a lo que se le rinde culto, sea a nivel social o personal. El mundo occidental ha sido hechizado por el Express, Capuchino, Macchiato, Frappé, Latte, Cortado, Irlandés, Vienés, Árabe, ¿Cómo fue?
El desarrollo de lo que hoy es un culto mundial en torno al café y de las cafeterías, nació en el siglo 14, en Turquía; El mundo occidental (Europa y el Mediterráneo) recibió esta influencia más tarde, y nacieron los centros de reunión social, intelectual y cultural. En la cafetería parisina Le Procope (1686) se hizo famosa la frecuente presencia de Jean Paul Sartre y su esposa Simone de Beauvoir, aunque ya antes había ganado renombre con parroquianos como Voltaire, Danton y Robserpiere. Es el restaurante-cafetería más antiguo del mundo, con el mérito de conservar la preferencia del público tras 326 años de operación.
Otra cafetería de fama mundial se llama Café de París, aunque su local más venerado está en Roma. A finales de los cincuenta era distinguido lugar de reunión de gigantes del firmamento cinematográfico de Italia, de la talla de Federico Fellini, Marcello Mastroiani, Claudia Cardinale, Sofía Loren y Lucino Visconti. Viscontti rodó ahí escenas de “La Dolce Vita”. Existen otros Café de París también en Suiza, España, México, Costa Rica, Estados Unidos ...y Francia, claro.
El café Greco (1760) fue el primero en Roma. Desde el inicio su ambiente acogió a músicos, escritores, filósofos, pensadores y artistas como el poeta John Keats y el filósofo Johann Wolfgang von Goethe, Franz Lizt, Georges Bizet y Richard Wagner.
En Les Margots (París, 1812), se veía a los surrealistas Picasso, Buñuel, Paul Klee, André Bretón y parroquianos con deseos de ver a las celebridades del momento o tomar un buen café en una esquina muy agradable de Saint Germain-des-Prés, en el Sixième.
Carlos Mérida, muralista y escultor guatemalteco compañero de Orozco, Rivera y Siqueiros, narró poco antes de su muerte (1983) que sus padres lo mandaron a estudiar a París, pero se volvió artista bajo la influencia de Picasso, Miró y Klée. “¿Qué iba a estudiar en París, maestro?” – No recuerdo, ingeniería o leyes, no sé. Pero ellos me enseñaron a pintar-. Héctor Cervera, el entrevistador, le preguntó si le instruyeron en las técnicas del color,… -No, no. Nunca hablamos de pintura. Nos juntábamos en un café a fumar opio y beber ajenjo hasta la madrugada. Así aprendí a pintar.
¿Por qué en torno al café se crean ambientes significativos? No hay una explicación demostrable, pero sí una historia. Cuenta la leyenda que las cabras de un pastor de Abisinia comieron un fruto silvestre desconocido para él, y comenzaron a saltar llenas de energía. Cuando él las probó, curioso, el resultado fue el mismo, así que llevó algunas semillas a un monasterio del rumbo y platicó a los religiosos su experiencia. El fruto les supo tan mal que arrojaron todos los granos a una hoguera. Y fue entonces cuando su aroma cautivó a todos los presentes; los monjes decidieron hacer algo con ese hallazgo, y poco a poco encontraron cómo preparar café en infusión. Se popularizó primero en los países de origen; la extensión de su aceptación generó un mercado internacional, y los inversionistas siguen el precio del café como el del oro o el del petróleo, dado el valor de su mercado mundial.
LOS DIEZ MEJORES
Entre los 10 mejores cafés del mundo hay 4 hechos con café arábica: Illy, Lavazza Qualité Oro, Il Cultori del Café y Saula Gran Espresso Premium. La Mexicana, marca madrileña con más de 100 años de vida, tuesta café de diversos orígenes. Sanani se abastece de las montañas del Yemen. Malongo Blue Mountain comercializa el Blue Mountain de Jamaica, la más cara del mundo (250 gramos, 57 Euros; 1 Kg, 295 Dlls). Segafredo Zanetti sirve 50 millones de tacitas de café express en todo el mundo, y de todos modos es uno de los mejores cafés del planeta. SZ, junto con la marca Lavanzza, tienen el precio más bajo de estos diez campeones mundiales: 17 Euros por kilogramo.
DE PRESTIGIO
Los cafés de mayor prestigio son Blue Mountain (Jamaica), Java (Indonesia), Cimaza (Kenia), Yauco Selecto (Puerto Rico), Moka Lim (Etiopía), La Minita Terrazu (Costa Rica), Volcán de Oro (Guatemala), Kona (Hawai), Santos (Brasil) y el conocido simplemente como “Café de Colombia”, de ese país.
ZONAS CAFETALERAS
Las principales regiones cafetaleras del mundo se concentran en los Trópicos de Cáncer y de Capricornio: en Brasil, Colombia, Costa Rica, Guatemala, Jamaica, México y Puerto Rico (América); Kenia, Tanzania, Uganda, Etiopía, Camerún, Costa de Marfil, Congo, Magadascar, Ruanda y Angola (África); Vietnam, India, Java, Sumatra, Filipinas, Malasia, Thailandia y Sri Lanka (Asia); Australia, Hawai, Nueva Caledonia y Papúa-Nueva Guinea (Oceanía). Destacan por su calidad Colombia, Costa Rica, Jamaica, Kenia, Java y Hawai. Dato curioso: México es el quinto productor de café, pero el primer consumidor de café soluble.
Texto: Alfonso López Collada ± Foto: Finca 2 jefes / Les deeux margots / Spoon cofee