El pulso trascendental de los museos en la capital germana
En sí mismos, los museos de Berlín conforman una colección de obras de arte; todos ellos son impactantes en su arquitectura, diferentes entre sí y unificados en una curación creada a través de los tiempos y acontecimientos que sacudieron y reconstruyeron la ciudad desde sus raíces.
Berlín es una de las más importantes capitales museísticas del mundo, de hecho, la denominada Museumsinsel o Isla de los Museos, ha sido nombrada Patrimonio Mundial por la UNESCO. En este conjunto, hasta hace poco podíamos ser testigos de la magnificencia del Altar de Zeus, considerada una octava maravilla del mundo, misma que ha tenido que permanecer cerrada al público (desde finales de septiembre del 2014) para su necesaria regeneración, por lo que podría ser reabierta hasta el año 2020 –aunque podría demorar algunos meses más, o incluso un año-. Sin embargo, Berlín es mucho más que el Altar de Zeus en Pérgamo.
Los museos de Berlín se encuentran en constante renovación, con grandes inversiones para su restauración y enriquecimiento de las colecciones que los integran. A continuación, hacemos mención de algunos de los más imperdibles, en una selección que plasma la diversidad y grandiosidad de los mismos, aunque bien vale la pena visitar absolutamente todos, y para ello, una visita no basta.
Memorial del Muro de Berlín
O en alemán: Gedenkstätte Berliner Mauer, este Memorial constituye un testigo y un emotivo aunque duro precedente de lo que fue la guerra y fractura de Alemania. El Muro de Berlín dividía al país; producto de un contexto generado desde finales de la Segunda Guerra Mundial, cuando Alemania prácticamente fue dividida en cuatro, debido a los intereses geopolíticos de las naciones aliadas y cuya capital, Berlín, era dominada por la Unión Soviética.
El contexto de la Guerra Fría fomentó que, luego de que el territorio ordenado por Estados Unidos, Francia y Gran Bretaña, se comprendiera como República Federal de Alemania (RFA) o Alemania Occidental, la URRS enseguida reaccionara generando la República Democrática Alemana (RDA) o Alemania Oriental, hacia 1949. Esta división causó un quebranto no sólo del territorio, sino del mismo pueblo alemán y cuyo muro representó el más crudo control, por lo que su caída en 1989, se convertiría en uno de los momentos más emotivos e icónicos de la dignidad, libertad y unión de la identidad y espíritu alemán.
Aún se conserva una parte de esta simbólica barrera, la cual descansa como una pacífica cicatriz de Alemania, junto a una torre de vigilancia, desde la cual se pueden apreciar impactantes vistas y que, a manera de monumento, permite crear conciencia de un pasado que marcó el destino de innumerables familias, así como del rostro humano en la historia de una posguerra que cobró demasiados caídos y víctimas innecesarias, cuyos nombres, podemos ver insc ritos en el Memorial.
Por su parte, el Dokumentationszentrum (o Centro de documentación), concentra la historia del muro, en tanto que en la Capilla de la Reconciliación, instaurada en el año 2000, se conmemora de forma continua a los fallecidos que cobró este conflicto. Actualmente, se ha instaurado la Fenster des Gedenkes (Ventana del recuerdo), en el antiguo cementerio Sophien-Friedhof. Como dato curioso, se pueden apreciar figuras de conejos de metal en el asfalto, los cuales representan a los únicos animales con el “permiso” para cruzar el límite en la zona de paso del Mauerpark.
Museum Berggruen
Frente al Palacio de Charlottenburg, en la parte occidental de Stülerbau y como parte de la Galería Nacional de Berlín, el Museum Berggruen concentra un legado concedido en un contrato renovable desde 1996, por el coleccionista y comerciante de arte Heinz Berggruen, en lo que él mismo llama “un gesto de reconciliación”; el cual incluye diversas obras maestras de artistas como Pablo Picasso, Henri Matisse, Alberto Giacometti, Paul Klee o Georges Braque.
En el caso de Picasso, la exposición permanente de más un centenar de obras del artista malagueño, titulada “Picasso y su tiempo”, se extiende a través de tres pisos. Se trata de una de las más completas colecciones de Picasso en todo el mundo, pues incluye trabajos sobre papel desde los inicios de su carrera, hasta complejos trabajos creados durante los últimos años de su vida, así como las etapas y corrientes vanguardistas que comprenden su obra.
Esta colección también incluye 60 obras de Paul Klee, así como esculturas de Alberto Giacometti y alrededor de 20 obras de Henri Matisse. La muestra de este museo no ha dejado de enriquecerse, con obras adquiridas de otras partes del mundo, incluyendo el MoMA de Nueva York.
Todo amante del más excelso arte clásico-moderno debe acudir a este museo, pues no tiene par en el mundo y aun cuando a estos artistas se les pueda apreciar en otras latitudes, Berlín los ha impregnado con un alma indescriptible.
Archivo Bauhaus
Arquitectos, escultores, pintores... debemos regresar al trabajo manual. Establezcamos, por lo tanto, una nueva cofradía de artesanos, libres de esa arrogancia que divide a las clases sociales y que busca erigir una barrera infranqueable entre los artesanos y los artistas.
Walter Gropius
El Museo Archivo Bauhaus es en sí una obra del arquitecto Walter Gropius, fundador del movimiento de arte en el contexto de la posguerra denominado Bauhaus; el cual expresa una ideología unificadora de las artes plásticas y la arquitectura, dotando así de un sin número de posibilidades de expresión a esta corriente, que paralelamente, busca una claridad y pulcritud en las formas, originando elementos más puros y funcionales. Es así como se consolidó una escuela y un estilo, quizás el más celebrado y ejecutado en todo el mundo, al menos durante el siglo XX.
Esta edificación icónica de Berlín –gracias a su original arquitectura de tragaluces-, construida entre 1976 y 1979, en la zona de Klingelhöferstraße, surgió con muchos contratiempos luego de la disolución del movimiento, para contener en ella un archivo permanente del mismo.
En este museo, podemos apreciar diversos ejemplos de obras y elementos representativos de la Bauhaus: arquitectura, piezas de cerámica, fotografía, escenografías, entre otras; así como obras de algunos de los más importantes expositores de la corriente; tales como Walter Gropius, Ludwig Mies van der Rohe, Paul Klee, Johannes Itten, Wassily Kandinsky, Lyonel Feininger, Oskar Schlemmer, Josef Albers o László Moholy-Nagy.
Debemos destacar que la raíz de la Bauhaus se estableció en la ciudad de Weimar durante 1919, cuando Walter Gropius unió la escuela Superior de arte del Gran Ducado con la escuela de Artes y Oficios, lo cual se conoció como la Bauhaus estatal de Weimar.
Käthe Kollwitz Museum
Este museo, creado en honor a la artista alemana y pacifista Käthe Kollwitz, es significativo porque la impactante obra expresiva de esta escultora y grafista, comprende temas completamente profundos y conmovedores para el pueblo alemán y para la humanidad; tales como la guerra, el hambre y el sufrimiento humano.
Se puede apreciar un tono de denuncia ante los horrores de las injusticias que miró y vivió de cerca Käthe Kollwitz durante su vida (1867–1945), quien a raíz de la guerra perdiera a un hijo y un nieto. Son pocas las escenas felices en la obra de Kollwitz y es precisamente su capacidad para expresar el dolor y los horrores que sufrió una sociedad entera, lo que le da un lugar tan emblemático en el imaginario colectivo de la identidad germana, pues también retrata su fortaleza.
Instaurado en 1986, este privado recinto -ubicado en el área de Charlottenburg-, acoge en cuatro pisos la obra de esta artista originaria de la vieja capital de Prusia, Königsberg -hoy en día territorio alemán-, y quien viviera durante medio siglo realizando su obra en Berlín. La colección abarca dibujos, carteles, grabados, litografías, esculturas y otras reproducciones que exploran el alma humana en su más intenso clamor, a través de piezas como “La llamada de la muerte”, “La muerte acogida como amiga” o “Viudas y huérfanos”, entre muchas otras.
Además de la exposición permanente, se pueden disfrutar muestras complementarias de la misma artista durante determinadas temporadas, las cuales se enfocan en el análisis a profundidad de diversos aspectos de su vida y obra, así como su conexión con los hechos históricos.
Neues Museum
Este museo, obra original de Friedrich August Stüler, que comenzara su construcción desde 1841, fue reconstruido en 2003 bajo la dirección del arquitecto David Chipperfield, pues se trata de uno de los sitios afectados por la II GM. Esta intervención ha permitido fusionar los mejores aspectos del antiguo estilo de Stüler, con la visión contemporánea de Chipperfield, ofreciendo así una edificación que encarna la más completa resurrección de Alemania y su cultura.
Actualmente, abierto desde el 2009 –luego de 70 años de permanecer cerrado- este recinto acoge las obras del Museo Egipcio, el Museo de Prehistoria y Protohistoria, así como la Colección de Papiros, componiendo así una extensa muestra que abarca 600 años de historia desde los antiguos inicios de la civilización humana. Contiene piezas emblemáticas como el busto de Nefertiti y una colosal estatua de Helios que data del siglo II, así como la colección del arte amarna del Museo Egipcio y elementos arqueológicos únicos, como el cráneo de Neandertal de Le Moustier. Asimismo, la colección de reliquias troyanas de Heinrich Schliemann, establece un referente importante para comprender el desarrollo de la humanidad a través de los tiempos antiguos.
Es así como el Nuevo Museo de Berlín, ubicado en la Isla de los Museos, establece una magnífica visión, una retrospectiva que abarca por completo la evolución del hombre en el planeta, así como el desarrollo de África, Egipto y Oriente. Se trata de uno de los museos más espectaculares de todo el globo y un elemento clave del por qué la Isla de los Museos es un verdadero Patrimonio Mundial.
Texto: Lizethe Dagdug ± Foto: PDR / ELVJF / ARYSE / SEISE / Peter Fechter / MUSEUMS PORTAL / FRITZ RAUTENBERG / BP RESTAURO / ROD SPLITZ / RMB