Fundada a principios del siglo XX, Lalique sigue siendo un nombre que resuena con la elegancia y el glamour de una época dorada del diseño.
᛫ Historia. Nacido en 1860, René Lalique fue un diseñador francés talentoso y prolífico que disfrutó de un gran éxito comercial durante su vida y continúa siendo popular entre los coleccionistas en la actualidad, comenta en la casa de subastas Bonhams. Comenzó como diseñador de joyas antes de pasarse al vidrio a inicios del siglo XX.
Al principio, operaba en un pequeño taller que producía frascos de perfume para minoristas y perfumistas como Coty y Guerlain antes de abrir la primera fábrica de Lalique en 1913 en Combs-La-Ville (un suburbio de París). Sus llamativos diseños se convirtieron en jarrones de vidrio, detalles para automóviles, objetos decorativos y artículos para el hogar, esculturas, iluminación y más, y pronto los clientes competían por sus elegantes piezas.
El éxito se produjo cuando se le pidió a Lalique que hiciera una fuente de vidrio monumental para la Exposición de Artes Decorativas de 1925, donde se acuñó por primera vez el término "Art Decó".
᛫ Estilo y acabado. La obra de Lalique refleja los estilos Art Nouveau y Art Déco que florecieron en Francia a finales del siglo XX, pasando con fluidez de las líneas sinuosas y orgánicas del primero al estilo más geométrico del segundo. Algunas de sus piezas más fascinantes son las de la década de 1920, en las que estos dos estilos compiten por el predominio.
Lalique es quizás más conocido por la variedad de acabados que aplicaba a su vidrio, incluyendo pulido, esmaltado y esmerilado, que era una forma particularmente exitosa de agregar profundidad y énfasis a sus diseños, similar a la forma en que un artista usaría grafito para sombrear.
Aunque no fue el inventor de la técnica, hizo el uso más creativo de la opalescencia dentro de sus diseños, que implica mezclar o inyectar una mezcla química (incluido arsénico) en el vidrio, luego enfriar y calentar el vidrio repetidamente hasta que el área se vuelve opalescente.
᛫ Innovaciones y técnicas. Lalique era un diseñador industrial que utilizaba tanto moldes y procesos de fabricación contemporáneos como técnicas tradicionales para alcanzar la máxima calidad de acabado. Muchos rivales intentaron imitar sus diseños, pero con poco éxito.
Su proceso consistía en hacer un molde de su diseño y luego verter vidrio fundido en él y dejarlo enfriar, aunque esto variaba; a veces el recipiente se soplaba a mano y luego se decoraba con elementos moldeados.
La producción de vidrio coloreado requería otra capa y complicaba el proceso, lo que explica las menores cantidades de estos diseños y sus consecuentes mayores valoraciones en subasta. La técnica más laboriosa era la de la cera perdida, que requiere romper el molde para extraer la pieza terminada. Como resultado, cada pieza era única y hay muy pocas en el mercado.
Tras la muerte de René Lalique en 1945, la empresa pasó a manos de su hijo Marc y se modificó la composición del vidrio, que pasó a llamarse «Lalique Cristal». Todavía utilizada en la actualidad, tiene un menor contenido de plomo y una estética notablemente diferente; la claridad del vidrio es mayor, pero las piezas tienen un mayor peso. La diferencia es quizás más evidente en el jarrón Bacchantes, que se produjo originalmente en vida de Lalique y que se sigue fabricando en la actualidad.
᛫ En el mercado. La mayoría de los coleccionistas buscan piezas tempranas de Lalique, que abarcan el período que va desde la década de 1920 hasta el estallido de la II Guerra Mundial, cuando el propio Lalique era el director y su mano se puede ver en el diseño, la composición y el acabado de cada objeto.
El costo pueden variar desde 329 dólares por un frasco de perfume 'Pavots D'Argent' de la década de 1920 para el perfumista francés Roger & Gallet hasta 2.05 millones de dólares por el juego de puertas dobles de cristal de Villa Millbrook, la casa de Lady Trent en Jersey.