Este lunes 11 de mayo se cumplen 116 años del nacimiento del artista español Salvador Dalí, considerado como uno de los máximos representantes del surrealismo.
A lo largo de su vida, Dalí realizó al menos 54 pinturas, siendo La persistencia de la memoria una de las más conocidas y aquella en la que las personas piensan cuando escuchan el nombre del genio surrealista; la pintura de los relojes.
Fue pintada en 1931, con relojes de bolsillo (todos marcando horas distintas) que parecen estarse derritiendo y en posiciones y sitios distintos; el resto es un paisaje de montañas con un objeto rectangular en la costa. Si bien ha sido analizada en múltiples ocasiones por expertos, poco pueden hablar sobre el verdadero significado.
Entre las principales interpretaciones están el que Salvador Dalí la realizó luego de mediar palabra con Albert Einstein sobre la teoría de la relatividad. Dawn Adès, historiadora de arte, sostuvo que los relojes son un símbolo inconsciente de la relatividad entre el tiempo y el espacio.
Por otra parte, cuando Dalí fue cuestionado, afirmó que la idea había sido originada tras pensar cómo se vería un queso camembert siendo derretido al sol.
La pintura se encuentra en el Museum of Modern Art (MoMA) desde 1934 y, según un análisis realizado por el mismo museo, señala que las hormigas en el reloj de la izquierda −las cuales aparecen en otras obras del pintor español− suelen representar la decadencia.
Los cuadros del artista son toda una experiencia al ser protagonizados por elementos surrealistas que crean mundos imposibles. En Estados Unidos, el Museo de Dalí de Florida lanzó una forma de vivir otra de sus pinturas más famosas en realidad virtual.
La experiencia se llama “Dreams of Dalí” y permite inmiscuirse en la Reminiscencia Arqueológica Del Angelus De Millet de 1935.