Este fin de semana –sábado 6 y domingo 7 de abril–, tendrá lugar la 18ª edición del Festival de Jazz Internacional de Polanco, en el Teatro Angela Peralta, en el Parque Lincoln de la Ciudad de México.

Entre los artistas invitados estarán la cantante francesa Ilhem; el guitarrista estadounidense Rotem Sivan; el saxofonista y compositor Danny Lerman, quien ha grabado con Dave Valentine y Hubert Laws, e iniciado los conciertos de Sergio Mendez, Herbie Hancock, entre otros jazzistas.

Alberto García, Omar Blancas, Omar Gardunho, Luis Martínez, Rafa Berrueta, Kevin Ayambadeyo, Tony Soto, Néstor Hernández, Alan Fajardo, Román Soto y Abraham Vázquez integrantes de la agrupación Polanco Jazz All Stars Orquesta estará presentes, acompañados por Soul Queens –Karely Esparza, Alicia González, Sandra Lau y Erika Albero–.

La cantante brasileña Jamile estará en el escenario, al igual que el pianista inglés Dan Costa, la intérprete española Inalaya Brown, el pianista cubano Osmany Paredes, al igual que Rich Rubio, un joven el baterista mexicano de 17 años de edad.

 

 

Programación sábado 6 abril:

᛫ Ilhem – Francia. 4:30 pm

᛫ Rotem Sivan – EE.UU. 5:15 pm

᛫ Danny Lerman – EE.UU. 6:00 pm

᛫ Polanco Jazz All Stars Orquesta & Soul Queens – México. 7:00 pm

Domingo 7 de abril:

Jamile – Brasil. 4:30 pm

Dan Costa – Inglaterra. 5:15 pm

Inalaya Brown – España. 6:15 pm

Osmany Paredes – Cuba. 7:30 pm

A la par del espectáculo musical, habrá un food court con interesantes propuestas gastronómicas, un bazar de arte, cultura y productos artesanales.

La pasión por el Jazz de Eduardo Schwarz

Detrás del festival está Eduardo Schwarz, apasionado al Jazz, quien tuvo la idea –o el reto– de hacer llegar este estilo de música a un público que no estaba apegado al género. Esto en abril de 2013. Y como todas las cosas cuando se inicia, no resultó fácil, en lo absoluto, considerando los estigmas que se tienen sobre el Jazz, pero el llevar a más público uno de los géneros que han sido la base de muchos otros ritmo que conocemos hoy en día, hizo que todo valiera la pena.

Lo importante fue llegar a los oídos de un mayor número de personas de todas las edades –especialmente los jóvenes– para que dejaran atrás el estigma de que el Jazz es música de acompañamiento de elevador o “de viejitos”. Pero, olvidemos lo que los demás piensan y escuchémoslo por nosotros mismos.