Enclavado en el corazón del desierto, donde el océano Pacífico abraza el chaparral costero y las cumbres de la Sierra Nevada, en Baja California Sur, El Perdido emerge como un refugio de serenidad.

Este hotel boutique, a una hora en auto de Cabo San Lucas y a 20 minutos de Todos Santos, redefine la hospitalidad al ofrecer una experiencia que invita a reconectar con el ritmo pausado de la vida. Aquí, el lujo no se mide en excesos ni en itinerarios, sino en la libertad de habitar un entorno donde el tiempo fluye con naturalidad y el estrés se desvanece con la brisa cálida del desierto.

Los “jacales” –villas privadas que reinterpretan la tradición con un enfoque contemporáneo –ofrecen una sensación de hogar sin perder la exclusividad de un hotel de lujo con sus amplias terrazas equipadas con hamacas, sala de estar, una pequeña cocina y patios privados con jardines de flora nativa.

 

Amura,AmuraWorld,AmuraYachts, Las zonas de convivencia invitan al descanso. Las zonas de convivencia invitan al descanso.

 

En su interior, la atmósfera se construye a partir de mobiliario que equilibra lo rústico con lo sofisticado, materiales nobles que evocan la calidez del desierto y una gama cromática diseñada para invitar al descanso. La estancia se complementa con un sistema de sonido y una selección de libros que invitan a sumergirse en el placer de la lectura, el silencio o la música.

A la vez es un destino gastronómico que celebra la autenticidad de los sabores locales. Su huerto orgánico provee ingredientes frescos para que los huéspedes experimenten con recetas tradicionales en un ambiente de total libertad. Para quienes buscan una inmersión más profunda, las estaciones de guacamole y mezcal permiten explorar los sabores y rituales de la cocina mexicana, mientras que El Coyote, el restaurante del hotel, eleva la gastronomía regional a una propuesta de alta cocina, donde los ingredientes locales cobran protagonismo.

 

Amura,AmuraWorld,AmuraYachts, Se aprovecharon los materiales de la zona para crear El Perdido. Se aprovecharon los materiales de la zona para crear El Perdido.

 

Los espacios comunes reflejan la misma filosofía de integración con la naturaleza. El huerto –diseñado en torno a la escultura del Árbol de la Vida– ofrece hierbas y vegetales que abastecen la cocina del hotel y de sus huéspedes; La capilla, con su suelo de tierra y muros de piedra, se convierte en un enclave de espiritualidad y un destino memorable para bodas y celebraciones íntimas, y El Observatorio –una estructura inspirada en la geometría sagrada– es el escenario perfecto para la contemplación del universo.

Las experiencias en El Perdido van más allá de sus muros. Sus excursiones revelan paisajes inexplorados, desde la playa de arena negra de Las Palmas –donde caballos salvajes galopan al amanecer— hasta El Aguaje, un oasis oculto donde el agua dulce fluye entre las rocas en medio del desierto. Estas travesías son viajes sensoriales guiados por locales que comparten su conocimiento y amor por la región.

Con una filosofía basada en el desarrollo sostenible, El Perdido destina parte de sus ingresos a proyectos comunitarios, fomenta el empleo entre los habitantes de El Pescadero y apuesta por una economía que beneficia a la región sin comprometer su identidad. En este refugio, el lujo no es solo una experiencia personal, sino una inversión en la preservación de un lugar que merece ser protegido.

 

Amura,AmuraWorld,AmuraYachts, En medio del desierto se localiza el hotel boutique El Perdido. En medio del desierto se localiza el hotel boutique El Perdido.