Si existe un lugar donde el lujo se entrelaza con la naturaleza más pura, donde cada amanecer parece una obra maestra y cada experiencia es una promesa de conexión profunda, ese lugar se llama Punta Mita.

Ubicado en el extremo norte de la Bahía de Banderas, este exclusivo destino de la Riviera Nayarit no solo deslumbra por su belleza, sino que seduce por su autenticidad, hospitalidad y sofisticación.

Desde las primeras luces del alba, Punta Mita invita al encuentro íntimo con la naturaleza. Las caminatas matutinas sobre la arena dorada –más de 14 km de playas– acariciada por el vaivén del Pacífico, despiertan los sentidos y preparan el espíritu para un día de descubrimientos. Los senderos naturales, ideales para recorrer en bicicleta o a pie, se convierten en rutas de contemplación donde se puede avistar aves, respirar la vegetación nativa y reconectar con lo esencial.

Los amantes del océano encuentran aquí un universo de posibilidades. Ya sea deslizándose sobre olas perfectas en tablas de surf, remando en paddle board al atardecer o explorando en kayak las calas escondidas, cada actividad es una inmersión en el espíritu aventurero del mar. Con el respaldo de Punta Mita Ocean Sports, los visitantes tienen acceso a equipo de primer nivel y asesoría experta, independientemente de su experiencia.

 

Amura,AmuraWorld,AmuraYachts, El surf puede practicarse en las playas de Punta Mita. El surf puede practicarse en las playas de Punta Mita.

 

Rutas que enamoran

Los caminos que recorren Punta Mita son postales vivas: panorámicas del océano, montañas lejanas y vegetación exuberante acompañan cada paso. Hay opciones para todos los niveles, desde senderos suaves hasta desafíos para excursionistas avezados, todos con la recompensa de una vista inolvidable.

A pocos minutos, Sayulita y San Pancho laten con energía propia. Son pueblos que mezclan arte, surf y espíritu bohemio, donde coloridos murales, galerías independientes y talleres artesanales coexisten con cafés orgánicos y música en vivo. Un paseo por sus calles es una lección de autenticidad y creatividad.

Para los más pequeños, el programa Kiddou transforma Punta Mita en un espacio ideal para las familias. Con actividades diseñadas para estimular la imaginación –como clases de cocina, juegos al aire libre y manualidades inspiradas en la naturaleza– los niños disfrutan de un entorno seguro y estimulante, mientras los adultos encuentran su propio equilibrio entre relax y exploración.

Punta Mita también se saborea. Ya sea un brunch frente al mar, una cena gourmet bajo las estrellas o una fusión audaz de cocina mexicana contemporánea en alguno de sus restaurantes de renombre, la propuesta culinaria del destino rinde tributo a su riqueza marina y cultural, conquistando incluso a los paladares más exigentes.

 

Deporte, lujo y precisión

Para los aficionados al golf, Punta Mita representa un templo del juego. Sus campos de clase mundial, diseñados por Jack Nicklaus, ofrecen vistas espectaculares y un reto técnico envolvente. La Punta Mita Golf Academy y su equipo de profesionales brindan instrucción personalizada en un entorno de excelencia. Y si se trata de raquetas, el Racquet Center permite disfrutar de tenis, pádel y pickleball –los deportes de mayor crecimiento en México– en instalaciones que combinan diseño, confort y un espíritu competitivo elegante.

En Punta Mita, cada jornada puede ser tan activa o contemplativa como se desee. Aquí, la naturaleza inspira, la aventura despierta, la cultura enriquece y el bienestar se convierte en un estilo de vida. Un destino que va más allá del viaje: es una vivencia que permanece, una joya del Pacífico mexicano que espera ser redescubierta en cada visita.

Punta Mita es un complejo y comunidad residencial de 700 hectáreas que alberga 27 comunidades residenciales, cinco clubes de playa residenciales y tres hoteles galardonados: The St. Regis Punta Mita, Four Seasons Resort Punta Mita y Four Seasons Resort Naviva, así como las próximas aperturas Montage Punta Mita y Pendry Punta Mita.