En pleno corazón del valle de Thredbo, donde el aire es más limpio y la montaña dicta el ritmo de los días, un nuevo capítulo se abre para los viajeros que buscan lujo relajado y experiencias al aire libre en Australia: Oaks Lake Crackenback Resort.

Se trata de un complejo que combina el encanto alpino con el estilo contemporáneo de la hospitalidad internacional. Asentado en la periferia del Parque Nacional Kosciuszko, un santuario natural que ofrece paisajes prístinos y cambiantes según la estación. En invierno, el atractivo se multiplica con la cercanía a las pistas de Thredbo y Perisher, dos de los dominios de esquí más famosos del país, ubicados a 15 minutos en auto. En verano, la misma geografía se transforma en un paraíso para el senderismo, el ciclismo de montaña y los deportes acuáticos.

Crackenback no busca ser únicamente un destino de nieve. En sintonía con la nueva filosofía de Oaks, la propiedad se concibe como un espacio de estilo de vida, donde la experiencia va más allá de la habitación. Tras la temporada invernal, el vestíbulo se convertirá en un punto de encuentro para huéspedes y locales, con café de especialidad preparado por baristas y repostería recién horneada, incluido el clásico lamington australiano (bizcocho en forma de cubo con cobertura de chocolate y coco rallado). Una despensa con productos locales permitirá a los visitantes abastecerse antes de salir a explorar los senderos alpinos.

Oaks Lake Crackenback Resort cuenta con 110 opciones de hospedaje, entre estudios, villas y chalets.

La oferta de actividades parece diseñada para viajeros inquietos: desde kayak y pesca en el lago hasta tenis, golf, tiro con arco o trail running. Para quienes buscan una aproximación más suave, el Harro’s Centre facilita el acceso a equipo de esquí en invierno, bicicletas de montaña en verano y hasta excursiones en Segway por los bosques circundantes. En el interior, las opciones de bienestar equilibran la balanza: piscina climatizada, sauna, gimnasio y un Spa & Wellness Centre que ofrece terapias diseñadas para devolver el cuerpo al ritmo pausado de la montaña.

En cuanto al alojamiento, el abanico es amplio y versátil. El resort cuenta con 110 opciones entre estudios, villas y chalets, algunos con chimenea y terraza. La arquitectura interior combina calidez y amplitud, pensando tanto en escapadas románticas como en viajes familiares o grupos de amigos.

La dimensión gastronómica suma carácter al conjunto. Entre los restaurantes del complejo destaca Perrotta’s Italian & Bar, que opera de forma independiente y aporta un toque mediterráneo a la experiencia alpina. La combinación de cocina italiana con productos frescos de la región le da un giro cosmopolita al tradicional après-ski.

La llegada de esta propiedad a la cartera de Oaks refuerza la presencia del grupo en Australia, donde en 2025 sumó seis aperturas estratégicas, desde Melbourne hasta Brisbane. Sin embargo, más allá de las cifras de expansión, lo que define al Oaks Lake Crackenback es su capacidad para convertirse en un refugio alpino durante todo el año, un lugar donde los viajeros pueden combinar deporte, relajación, gastronomía y naturaleza sin renunciar al confort.

Para quienes viajan a Australia en busca de experiencias auténticas y sofisticadas, este rincón de las Montañas Nevadas ofrece la posibilidad de vivir el espíritu alpino con una hospitalidad que entiende que el lujo verdadero está en los detalles: un café perfecto por la mañana, una caminata entre bosques intactos o el silencio de la nieve al caer frente a la chimenea.