El ganador del Gran Premio de México de Fórmula 1 recibirá el domingo 26 de octubre un trofeo muy especial en el Autódromo Hermanos Rodríguez de la Ciudad de México, con motivo del décimo aniversario de la celebración de la competencia en su etapa más reciente.
Diseñado y creado por la casa joyera mexicana TANE, el trofeo mantiene su inspiración en las alas del águila de la bandera mexicana envolviendo una copa de estructura cónica: un gesto característico que ha vuelto al trofeo tan reconocible.
La obra está elaborada en plata .925 y vermeil de oro amarillo de 23 quilates sobre una base labrada a mano en aventurina natural. Al reverso de la copa, se recrea la bandera de México con esmalte tricolor, aportando un toque de color único que contrasta con el brillo del metal, sellando la identidad del trofeo.
Los orfebres de TANE fabricaron cuatro trofeos, para cada uno de los tres puestos del podio y uno adicional para la escudería vencedora, en dos formatos diferenciados. Las dimensiones para el piloto y el constructor que logren el primer lugar son aproximadamente de 15×10×60 cm, mientras que los trofeos para el segundo y tercer sitio miden 12×10×46 cm.
Desde el más reciente regreso de Fórmula 1 a México hace una década, el Trofeo TANE ha sido levantado por cuatro pilotos: el alemán Nico Rosberg (2015, Mercedes), el inglés Lewis Hamilton (2016 y 2019, Mercedes), el neerlandés Max Verstappen (2017, 2018, 2021, 2022 y 2023, Red Bull) y el español Carlos Sainz (2024, Ferrari).
Para conmemorar la tradición de diez años de este diseño, TANE creó la pieza de colección: Trofeo Formula 1 Gran Premio de la Ciudad de México – Edición de Colección 10º Aniversario 2025, una obra a escala que rinde homenaje al origen del mítico trofeo, al recrear con absoluta fidelidad el diseño original del 2015 en plata .925 con detalles en esmalte tricolor, vermeil de oro amarillo de 23 quilates, y trayendo de vuelta su pedestal original de obsidiana.
El coleccionable es una edición limitada de 24 obras numeradas y personalizables. Esta obra celebra la unión perfecta entre el brillo incansable de la plata de TANE y la inigualable experiencia del Formula 1 Gran Premio de la Ciudad de México.