Una pantera con huella perpetua

Desde la concepción de su primer motivo de manchas de pantera en un reloj de pulsera, en 1914, Cartier ha mantenido una presencia constante al paso de los años. En cada diseño, la firma evoca instantáneamente un estilo único: figurativo, gráfico, juguetón, dulce, salvaje, lascivo, feroz o cinético, el cual multiplica las sorpresas.

Es así como este 2014, fiel a su aura de audacia y sofisticación joyera, la pantera Cartier vuelve a destacar por su presencia extraordinaria y moderna, mediante una colección de 56 piezas, donde joyas de un gran savoir faire, que extraen su vitalidad creativa de la energía de la fiera totémica de la firma, hacen de este felino el héroe absoluto.

El brazalete de oro blanco, ónix, esmeraldas, diamantes y presenta una silueta flexible, lúdica y graciosa, la cual se enrolla alrededor de sí misma, como una acróbata traviesa cuya presencia se enternece gracias a unas patas juguetonas. Una pantera que saca provecho de su seducción, plegándose y divirtiéndose en torno a un citrino facetado, funámbula preciosa cuya ligereza formal parece posarse sin pesar.

 

 

Texto: © Cartier ± Foto: Vincent Wulverick © Cartier 2014