Sin lugar a dudas, Moonen siempre hace lanzamientos que levantan revuelo entre la prensa, conocedores y gente no tan experimentada. El NORTHLANDER es una muestra del trabajo del equipo completo de Moonen y las empresas involucradas en su construcción.
El exterior es discreto y clásico, con algunos toques modernos, aunque en términos generales sigue una tendencia clasicista de diseño. La línea es más bien angulosa y con cambios muy buen definidos. A pesar de su innegable diseño tradicional este hermoso yate nos permite relajarnos y realmente disfrutar de la travesía. Partiendo de la base de que este barco fue concebido desde un inicio como embarcación para charter, no deja de tener elementos distintivos que lo ubican como un yate de pocos.
Merece especial atención el cuidado que se tuvo desde el principio para la elección de configuraciones que permiten el aprovechamiento máximo de la luz. Por ello la elección de grandes ventanales laterales y traseros (de popa) que permiten maximizar la luz natural de este hermoso yate. Otra prueba son las interesantes escaleras que nos conducen a las cuatro cubiertas y que, mediante un sistema automatizado nos permite ocultarlas y convertir el cubo en una ayuda más.
La cubierta superior nos invita a la relajación al aire libre, ya que cuenta con un jacuzzi en la popa – detalle cada vez más difundido en el mundo marítimo – así como una mesa redonda para diez personas y, por último, el acceso a las cubiertas inferiores a través de las antes mencionadas escaleras.
La cubierta del puesto de mando es bastante interesante ya que está dedicada casi en su totalidad como una cubierta para el puente de mando y todos los controles y navegación que requiere el yate para hacer cruces trasatlánticos. En la popa se encuentra una extensa área libre que nos sirve para montar cualquier tipo de infraestructura que necesite el barco para el entretenimiento.
En la sección exterior encontramos una lounge resguardado por vidrios laterales que permiten estar al aire libre pero protegidos tanto del sol como de los vientos. Más adelante está la cocineta y a estribor las otras escaleras que conducen a la cubierta superior. Por último, en la proa se encuentra el puesto de mando, cuenta con los últimos avances en tecnología de navegación, permite una visibilidad privilegiada del campo de acción del capitán.
La cubierta principal es el lugar en donde está el camarote más amplio que, por definición, es el camarote principal. En la parte posterior de esta cubierta encontramos la cocina así como el comedor con seis sillas rodeando la mesa y unos sillones que permiten acomodarse a tres comensales más, pasando la mampara que divide los ambientes, encontramos una sala interior y otra en el exterior.
Por último la cubierta inferior que es en dónde están todos los camarotes – incluidos los de tripulación– y que hacen de la estancia todo un deleite ya que cuentan con todos los avances de entretenimiento y los relacionados con el tema. En total son cuatro camarotes para invitados dos con camas matrimoniales y otros dos con camas individuales, todas con baño propio.
El Moonen Northlander es, sin duda, un trasatlántico en toda la extensión de la palabra. El capitán que tuvo la oportunidad de pilotearlo desde el viejo continente a “las indias” o mejor conocidas como el “Nuevo Continente” tuvo comentarios muy positivos en cuanto al desempeño de este barco en altamar.
Moonen, como siempre, dándole al mundo náutico de qué hablar.
Especificaciones
Eslora
38.16 m
Manga
8.60 m
Capacidad agua
8,000 l
Capacidad combustible
45,500 l
Motor
2 X MTU 16V 2000 M60
2 X 1073 bHP @ 1800 RPM
Desplazamiento
330,000 Kg
Velocidad máxima
14.5 nudos(26.85 km/h)
Texto: Edmundo A. Eguiarte ± Foto: Moonen Shipyards