El retrato “Joven Sosteniendo un medallón”, de Sandro Botticelli, es la última pintura de la categoría “Old Master” (arte europeo anterior al 1800) que haya sido subastada, además de ser la segunda más costosa de la historia. El retrato fue pujado por la casa Sotheby’s y, desafiando la crisis, fue adjudicado a su comprador por la cuantiosa cantidad de $92 millones 184 mil dólares.

Sin demeritar la obra en cuestión, ciertamente preferiría invertir esos 92 millones en otra forma de arte, y no en cualquiera, sino en las siguientes 10 piezas de arte con ruedas:

Ferrari 250 GT Lusso

Lusso es uno de los autos Ferrari más espectaculares diseñado por Pininfarina y construido por Scaglietti. El Lusso fue la culminación de una década de desarrollos mecánicos constantes. Este es un coche que posee una mezcla perfecta de lujo, que se plasma desde su nombre “Lusso”, y desempeño deportivo producto de un motor V12 de 3 litros. No es de extrañar que Steve McQueen le regalara uno a su esposa y fuera él quien lo condujera.

 

 

Bentley 8 litres Open Tourer

Bentley siempre se ha caracterizado por hacer coches grandes y brutales. A principios de los 30, y con la suficiente experiencia en carreras, la marca exhibió por primera vez en el London Motor Show el modelo “8 litre” para la calle. El ADN de las carreras se notaba en su inmenso motor de 8 litros, que podía alcanzar hasta las 100 millas por hora (160 km/hr.) Aunque el coche medía 5.4 metros de longitud.

 

 

Ferrari 599 GTO

Pocos son los Ferrari que han tenido el honor de llevar las siglas “GTO” (Gran Turismo Omologato) y este modelo honró su nombre desde el momento en que marcó el mejor tiempo en la pista de pruebas de la marca. Se trata de un modelo que se inspira y revive el Ferrari 250 GTO de los sesenta. Cuando este coche fue lanzado en 2010, Ferrari puso la vara muy alta a sus competidores, y es que, aunque mucho ha cambiado desde 1962, las bases de ambos coches siguen siendo las mismas: motor V12 frontal, tracción trasera y una excelente distribución de peso gracias a la posición del motor.

 

 

1930`s Bugatti Type 59 Sports

Hoy en día, la marca Bugatti es conocida por sus automóviles súper deportivos Veyron y Chiron, sin embargo, hubo una época en la que Bugatti fabricaba los mejores coches de carreras. El modelo Type 59 fue uno ellos, conducido por los mejores pilotos de la época. El coche obtuvo múltiples victorias dentro de las que resaltan un tercer lugar en el Gran Premio de Mónaco, y la victoria en el Gran Premio de Bélgica. Sin duda se trata de uno de los coches más codiciados, resultado de una exclusiva producción de únicamente ocho modelos; cinco de ellos todavía están en existencia.

 

 

Alfa Romeo B.A.T. 5, 7 y 9 

Estos tres modelos son únicos. Alfa Romeo B.A.T. 5, 7 y 9 fueron hechos totalmente a mano y diseñados con un solo objetivo: tener el menor efecto de resistencia al aire posible. Sus siglas B.A.T. lo dicen todo: “Berlinetta Aerodinámica Técnica”. El diseñador Bertone usó elementos de su experiencia trabajando en perfiles de alas en la industria aeronáutica. Estas tres piezas de arte se subastaron como un lote único en Octubre 2020, y es más probable que se hayan ido a una sala de arte que a un sitio de autos.

 

 

Pagani Zonda F

Un coche que merezca la pena debe tener un toque especial, y el Pagani Zonda F no es la excepción; se trata de un auto fabricado por el ingeniero italiano de componentes aeroespaciales, Horacio Pagani. El Zonda F cuenta con un motor 7.3 litros V12 construido por AMG Mercedes, que produce 602 caballos de fuerza y tiene un peso total de 1,230 kg. Únicamente existen 60 ejemplares de este modelo, por lo que su exclusividad está garantizada.

 

 

Aston Martin DBR1 

Nunca hubo ninguna duda de que el Aston Martin DBR1 fue supremo entre los corredores deportivos de la década de 1950. Este coche ganó los 1,000 km de Nurburgring en 1958 y corrió en Le Mans cuatro veces. Leyendas como Stirling Moss, Jim Clark, Jack Brabham y Carroll Shelby lo condujeron. En 2017, uno de estos escasos ejemplares fue subastado en Monterrey por la cantidad de 22 millones de dólares, haciéndolo no solo el Aston Martin más costoso en una subasta, sino también el coche británico más costoso en subastarse.

 

 

Alfa Romeo 8c 2900 B Lungo Spider

Uno de los coches más deportivos y exclusivos de la preguerra (para los conocedores, “preguerra” (periodo automovilístico previo al término de la Segunda Guerra Mundial). Los siete ejemplares Lungo Spider fueron fabricados en 1939 y eran, por decir lo menos, sofisticados. Bajo el largo y elegante cofre, hay un motor de 2.9 litros sobrealimentado de 8 cilindros en línea recta, heredado de los autos de carreras de la fábrica de Alfa Romeo. Toda esta tecnología le dio al coche una velocidad máxima de casi 180 km/hr. Nada mal, teniendo en cuenta que un avión de combate de la misma época probablemente podría hacer poco más de 400 km/hr.

 

 

1947 Rolls-Royce Silver Wraith Inskip Convertible.

El modelo Silver Wraith fue el último modelo de Rolls-Royce que se entregó en forma de “solo chasis”, con el fin de recibir una amplia variedad de carrocerías diseñadas y fabricadas a la medida del cliente. Los últimos dos Rolls-Royce producidos con carrocerías personalizadas estadounidenses fueron este par de cupés descapotables, construidos por la firma de diseño Brewster para el importador J.S. Inskip de Nueva York. El más famoso de los dos fue ordenado por un neoyorquino millonario, y exhibido por primera vez en el Salón Internacional del Automóvil de Nueva York de 1949 y subastado por última vez en Pebble Beach, donde se publicó en un estimado de $1,250,000 a $2,000,000 USD.

 

 

Porsche 959 1982

El 959 sirvió como la guía tecnológica no solo para Porsche, sino para todos los súper deportivos de los ochenta, noventa e incluso del siglo XXI. Este Porsche se adelantó tanto a su tiempo que parece que solo ahora nos estamos poniendo al día. Contaba con tracción en las cuatro ruedas, altura de manejo ajustable, ruedas de magnesio con radios huecos, control de presión de los neumáticos y una caja de cambios de seis velocidades, además de un motor biturbo. A pesar de que el motor estaba refrigerado por aire como dictaba la tradición de Porsche, utilizaba cabezas de cilindros refrigerados por agua. El motor del 959 no era solo un motor 911 Turbo con alguna tecnología nueva, sino que era muy similar al motor que impulsaba al 936 y al 956 y 962 que dominaban Le Mans, aunque, claro, más amigable para la ciudad.

 

 

Texto: Daniel Marchand M. / Esta dirección de correo electrónico está siendo protegida contra los robots de spam. Necesita tener JavaScript habilitado para poder verlo. ± Foto: Cortesía Sotheby’s, 1· C_ @kevinvanc, 2· @mmclassicscollection 3· @philipprupprecht 4· @goodingandcompany 5· @rmsothebys, 6·Pagani Zonda, 7· Aston Martin DBR1, 8· Alfa Romeo 8c 2900 B Lungo Spider 9· 1947 Rolls-Royce Silver Wraith Inskip Convertible, 10· @mmclassicscollection