Lugar de la tortuga marina

Las tortugas marinas son reptiles que han sobrevivido más de 200 millones de años en el planeta. Actualmente el territorio mexicano es receptor de seis de las siete especies de tortugas marinas existentes en el mundo.

Las especies que llegan a la República mexicana son la tortuga laúd, verde (o prieta), lora, carey, caguama y golfina, siendo esta última la que más se reproduce en nuestro territorio. Esto sitúa a México como el lugar más importante del planeta para su conservación. Sin embargo, las poblaciones anidadoras de tortugas en las costas del Pacífico oriental y occidental han disminuido en 85% durante los últimos 20 años, lo cual es más que preocupante.

 

 

Oe marzo a noviembre de cada año las maravillosas playas de Oaxaca se convierten en una fortaleza para la vida y la propagación de las tortugas marinas. Un punto de suma importancia para estos animales es Mazunte, localidad ubicada 272 kilómetros al sur de la ciudad de Oaxaca, en medio del corredor turístico Huatulco-Puerto Escondido. Mazunte, o Maxontetia, es un vocablo náhuatl que significa "¡Te pido por favor que desoves!’.

A principios del siglo XX Mazunte contaba con muy pocos habitantes, por lo inaccesible del lugar. Durante la década de 1960 la explotación de las tortugas marinas se convirtió en la actividad principal de la población, por lo que en mayo de 1990, al decretarse su veda total debido a la gran cacería, el modo de subsistencia de la localidad se vio severamente afectado.

Afortunadamente la historia ha cambiado. Hoy Mazunte es famoso porque ahí se ubica el Centro Mexicano de la Tortuga (CMT), que abarca una superficie de cuatro hectáreas, creado en septiembre de 1991 por el Gobierno Federal.

 

 

 

 

El CMT se fundó ante la inminente desaparición de las especies de tortugas marinas, y con su creación Mazunte pasó de ser un lugar de sacrificio y destrucción de la tortuga a ser una comunidad que asumió y transmite una nueva actitud ante el mundo: la conservación.

En el Centro se exhiben todas las especies de tortugas que habitan los litorales de México, donde además biólogos, oceanólogos y otros profesionales estudian el comportamiento y la forma de vida de estos seres. Lo anterior convierte al Estado de Oaxaca es el sitio más importante de llegadas de tortugas en México.

Las tortugas marinas tienen migraciones por casi todo el continente americano, pues luego de nacer en playas mexicanas, aquellas que libran a sus predadores, se desplazan hacia el sur, por la zona costera de Chiapas, Guatemala, Costa Rica y Panamá, hasta llegar a Sudamérica, donde arriban hasta las costas de Chile.

Al índice de depredación natural se suma el del ser humano, con el saqueo de nidos para la venta de huevos y tráfico de carne y caparazones, aun de las especies protegidas, consideradas en extinción.

La tortuga lora es una especie endémica de México, es decir que sólo en nuestro territorio encuentra zonas para dejar sus huevos y reproducirse. El panorama no es de lo más optimista. Dada la declinación que han sufrido la tortuga lora y la tortuga laúd en los últimos años están consideradas como especies en peligro de extinción por la Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza.

 

 

 

Cada hembra de tortuga lora y tortuga golfina desova 120 huevos en promedio, y de éstos sólo 80% producirá crías que lleguen al mar. La tortuga laúd desova en promedio 60 huevos, y de éstos 40% producirá crías que lleguen al mar De estas tres especies mencionadas, menos de 1% alcanzará la edad adulta y regresará a las playas a reproducirse

En cuanto a la tortuga laúd, actualmente quedan menos de 300 en todo México, debido principalmente al saqueo de huevos en las playas de anidación y a la matanza de adultos en las pesquerías. Otro ejemplo, la concha de la tortuga carey es muy preciada para la elaboración de artesanías y ornamentos, por lo que su depredación por el ser humano es drástica y está a punto de desaparecer, a pesar de las medidas de conservación actuales.

Debido a la baja cultura ecológica y a la poca orientación hacia una conciencia de protección, ninguna de las especies escapa a estar en peligro de extinción. Durante mucho tiempo ha persistido el saqueo clandestino de nidos y un mal manejo de la especie, por lo que se corre un terrible riesgo si no se fortalecen los esfuerzos que permitan su protección y garantía de vida, de las que México ha de dar la cara ante la humanidad.

 

 

Texto: Germán Nájera ± Foto: Archivo