La arquitectura de la libertad
Zaha Hadid describía al Irak de su infancia como un país liberal, en el cual hasta 1958, incluso había un Ministerio de la Mujer. En varias entrevistas contaba que el primer recuerdo de su vocación procedía de los seis o siete años y estaba relacionado con la construcción de la casa de su tía; refería un momento en el que ella pudo ver desde muy cerca y por primera vez un plano arquitectónico, siendo algo tan mágico que la intrigó fascinándola.
Su padre, Mohamed Hadid, prominente personalidad de Bagdad, le proveyó de la mejor formación disponible. Al terminar sus estudios en la Universidad Americana de Beirut, en el campo de las matemáticas, cursó la carrera de arquitectura en la Escuela de Arquitectura de la Asociación Arquitectónica de Londres esta ciudad se convirtió desde entonces, en el escenario de despegue y consolidación de su monumental carrera profesional.
“La arquitectura es una de las artes más complejas. Por eso es tan poderosa”
En 1978 formó parte de la Oficina de Arquitectura Metropolitana (OMA) -vanguardia de la arquitectura en Londres- al tiempo que enseñaba en la Architectural Association. En 1979 fundó Zaha Hadid Architechts. A un nivel más profundo, se perfeccionaba su voluntad de hierro: una mujer, inmigrante, árabe, enfrentando un muro de prejuicios, pero ella convirtió cada obstáculo en certeza.
Durante los siguientes 20 años, sus trabajos estuvieron considerados como fantasías imposibles de construir; sin embargo en 1983, sus dibujos y proyectos fueron reconocidos durante una exposición retrospectiva en la Architectural Association, en Londres. Desde entonces han sido mostrados en colecciones de los más importantes museos del mundo.
Con la firme convicción de ser una pionera, Zaha Hadid, se permitió romper todas las reglas posibles: fragmentó la realidad, reinventándola con un lápiz como varita mágica para liberarse de los preceptos, del universo finito de los planos de dibujo; creó formas sin límites, imposibles, desprejuiciadas, desafiantes, libres de los ángulos simétricos; una mezcla de todas las técnicas y de todas las teorías, para reconcebir la arquitectura en un juego que logra desafiar las leyes de la gravedad y de la lógica al pie del precipicio, para luego integrarse grácilmente como una parte del aire.
Incontables veces ganó concursos que finalmente no se construían; mientras ella continuaba con su labor docente, establecía vínculos y colaboraciones con muchas otras áreas. Siempre con los líderes en cada ramo diseñó: escenografías; exposiciones; joyas; moda; objetos; muebles, que son sujetos de culto, como lo fue una mesita de centro acrílica, de resina liquida glacial, que imita el agua filtrándose, encomendada por David Gil Gallery, misma que estuvo nominada en el segmento de muebles, en los premios Museo del Diseño de Londres 2013.
Singular también es el prototipo de un super yate, el más grande y asombroso, en asociación con los constructores alemanes Blohm y Boss, cuyo modelo digital es posible disfrutar con tecnología de realidad virtual en la tienda Imagine de Selfridges, Londres.
Tenía 43 años en 1993, cuando edificó lo que se dice fue su primera obra: la estación de bomberos dentro del complejo Vitra, en Alemania. Otro paso importante en su consolidación internacional ocurrió en 2001 con su innovador diseño del trampolín de saltos de Bergisel, en Innsbruck, Austria; a partir de lo cual construyó en prácticamente el mundo entero: desarrollos urbanos, culturales, educativos, médicos, turísticos, industriales, de usos múltiples, oficinas, residenciales, deportivos, áreas sustentables, torres, terminales de transporte; todo esto bajo su propia firma: Zaha Hadid Arquitechts.
Durante 14 años desarrolló una vertiginosa carrera, dedicada en cuerpo y alma a la pasión de su vida. No se casó, ni tuvo descendencia. Fue el momento de los grandes logros y de los merecidos reconocimientos, que se cuentan por cientos. Fue la primera mujer en recibir el premio Pritzker en solitario, en 2004. Además de la Orden Dama Comandante del Imperio Británico por servicios a la arquitectura, Doctor Honoris Causa de la Universidad de Artes de Londres, y fue integrante del grupo editorial de la Enciclopedia Británica, entre muchos otros.
Un mes después de haber recibido la Medalla de Oro del Royal Institute of British Architects –fue también la primera mujer en merecerlo- en el pináculo de su carrera profesional. El día 31 de marzo de 2016, su vida física dejó de existir, dando paso a una leyenda de dimensiones que todavía son imposibles de vislumbrar y describir. Dejó alrededor de 36 proyectos por finalizar, algunos en construcción y otros en su etapa de diseño en 21 países alrededor del mundo; todos serán terminados, de acuerdo a comunicaciones de la firma Zaha Hadid Architects.
Centro Heydar Aliyev en Bakú
Inaugurado en el año 2013, rápidamente se ha convertido en cita obligada para cualquier visitante y habitante de Bakú. Es una obra emblemática de Zaha Hadid, que ganó su despacho por concurso en el año 2007, destinado para ser la sede de los programas culturales de la República de Azerbaiyán. Fue diseñado con la intención de establecer una interrelación con la plaza y áreas que lo rodean, como una sola parte del trazo urbano de Bakú; se eleva para envolver otro espacio público interior, con varias salas para eventos grupales, biblioteca, museo, centro de conferencias, tres auditorios cuyos programas y contenidos se mueven alrededor del arte tradicional y contemporáneo azerbaiyani y sus múltiples lazos con otras culturas de la región.
Texto: Maruchy Behmaras ± Foto: Zaha Hadid Architects / WIRED / © TAWATCHAI PRAKOBKIT / © TANAWAT PONTCHOUR / © ZHI EN HUANG / © TANGDUCMINH / © BEIJING HETUCHUANGY / MTCV / TCHNIVER / SAHARGHAZALE / ART DESIGN / TCHNIVER / SAHARGHAZALE / ART DESIGN / AYT IBIZA / ADTCC / BP / © EQ ROY / © SILVIU MATEI / EESTATIC