Australia es un gran continente rodeado por mares que dibujan una costa hermosa de playas extraordinarias, profundas e insólitas bahías, sorprendentes acantilados. Las distancias son inmensas y la navegación a lo largo de la costa es una aventura llena de desafíos, enfrentando corrientes peligrosas y cambios de clima amenazadores.
Kakadu es una extensión de pantanos, también llamados “billabong”, y ríos, en el norte del continente, región exótica que se ha hecho famosa y a la que casi todos conocen pues ha sido escenario de la película Crocodile Dundee. Kakadu está delimitada por un acantilado, donde encontramos pinturas de aborígenes, e impresionantes cascadas.
Desde sus ventanas admiramos la hermosa bahía de Sydney, desde donde se ven la ópera y el puente metálico, dos símbolos de la gran ciudad. Como siempre, Four Seasons sabe brindar excelente servicio y atención personalizada.
En pleno centro financiero de Sydney, a un paso de la ópera y los embarcaderos de los ferrys, el Sofitel Wentworth inventa el lujo al estilo minimalista, creando un espacio joven y elegante. La calidez de sus espacios, la sobriedad de su decorado y la perfección de la atención hacen del hotel uno de los más acogedores de Sydney.
Construido en 1883 y maravillosamente restaurado por el grupo Oberoi, el Windsor es un monumento nacional, un emblema de Melbourne que recuerda la elegancia del pasado victoriano. Sus salones conservan el ambiente de antes, cuya restauración atesora la elegancia de otros tiempos, y sus muros vibran con la historia de momentos de auge y de crisis.
