Uno de los secretos mejor guardados de Alemania; Armand de Brignac, existe desde 1763 y es propiedad de la familia Cattier. Estos viñedos se asoman en Chigney-les-Roses y son calificados como “Premier Cru”.
La isla de Santa Lucía es un destino de exuberante belleza y donde comer es un absoluto placer, en especial con un concepto completamente orgánico y local como el de Dasheene.
En las Islas Maldivas existe un espacio subacuático sin par el mundo, donde el espectáculo marino acompaña la cena, mientras nos asombramos con la majestuosidad del océano en la comodidad de una de las mesas más caprichosas de la humanidad, la cual nos aproxima al sueño de “vivir bajo el mar”.
Los restaurantes ubicados dentro de cuevas demandan ser perfectos, y más con una vista como la que ofrece The Grotto en el complejo Rayavadee, en Krabi, Tailandia.
En la provincia de Bari, Italia, en el precioso pueblo Polignano a Marese, se resguarda dentro de una magnífica gruta, este templo de la gastronomía y un rincón de ensueño que conmueve con su inigualable vista a quien tenga la suerte de amanecer, atardecer o anochecer en una de sus mesas.
Nada conforta y estremece el corazón como lo hace el mar, que con sus infinitas vistas mejora cualquier experiencia, en particular si se trata de vivencias culinarias.
Ubicado en la Torre del teleférico del Port Vell de Barcelona, este restaurante ofrece vistas de 360°, donde el mar Mediterráneo se impone con su etérea belleza, dentro de un ambiente muy ad hoc para las alturas, pues la alta gastronomía se conjuga con elegancia para ofrecer una experiencia memorable.
Una guarida de talante italiano en el corazón del hotel Conrad, cuenta especialidades que lo convierten en un must de este destino, tales como sus risottos y cortes Angus, además de los platillos con frutos del mar y dulces postres.
Un hombre que ha logrado romper paradigmas y normas de un modo divertido, despreocupado y ameno. Ha trabajado en la escena gastronómica desde hace 22 años y su restaurante Mark Greenaway es ya un estandarte dentro de la cocina local e internacional.
El reconocido chef internacional Jean-Georges Vongerichten llevó la delicia de sus creaciones gastronómicas a posarse sobre las hermosas playas de Nassau, en una duna de arena blanca, para regalar a los asistentes el disfrute de sus platillos y del paisaje de aguas esmeralda.